L D (EFE) El sucesor de Djindjic como primer ministro, Zoran Zivkovic, anunció en una rueda de prensa extraordinaria de que junto con Jovanovic, fue arrestado Sasa Pejakovic, miembro de la JSO, como sospechoso de participar directamente en el atentado contra Djindjic del pasado día 12. También ha sido suspendido y detenido el comandante de la JSO Dusan Maricic por vínculos con el "clan de Zemun", la mayor banda mafiosa de Belgrado, a la que el Gobierno responsabilizó del asesinato de Djindjic. El “clan de Zemun”, del que forman parte más de 200 mafiosos, es encabezado por el ex comandante del JSO Milorad Lukovic, alias Legija, que se encuentra en paradero desconocido y al que se considera responsable de organizar el magnicidio.
Desde el asesinato de Djindjic hace casi dos semanas, las fuerzas de seguridad serbias han detenido a cerca de un millar de personas, a las que pueden mantener incomunicadas hasta 30 días en base al estado de excepción declarado por el Gobierno de Belgrado para tratar de esclarecer el crimen. Zivkovic y su gabinete consideran que en el magnicidio está involucrada no solo la mafia, sino amplios sectores del poder y círculos políticos cercanos al derrocado presidente serbio Slobodan Milosevic. Prueba de ello es la detención la pasada semana del suplente del fiscal Milan Sarajlic por su vinculación con círculos mafiosos, así como de otros altos funcionarios públicos de la época de Milosevic.
Desde el asesinato de Djindjic hace casi dos semanas, las fuerzas de seguridad serbias han detenido a cerca de un millar de personas, a las que pueden mantener incomunicadas hasta 30 días en base al estado de excepción declarado por el Gobierno de Belgrado para tratar de esclarecer el crimen. Zivkovic y su gabinete consideran que en el magnicidio está involucrada no solo la mafia, sino amplios sectores del poder y círculos políticos cercanos al derrocado presidente serbio Slobodan Milosevic. Prueba de ello es la detención la pasada semana del suplente del fiscal Milan Sarajlic por su vinculación con círculos mafiosos, así como de otros altos funcionarios públicos de la época de Milosevic.