L D (N. G. Mostazo) Fuentes del Pentágono han confirmado a Fox News que sus tropas en Irak han detenido a Farouk Hijazi, considerado el número 3 de los servicios de espionaje iraquíes. El arresto se produjo este jueves en la frontera entre Irak y Siria, según las mismas fuentes, que matizaron que las autoridades de Damasco podrían haber facilitado la operación de captura tras denegarle el asilo político que Hijazi había solicitado en Siria.
Aunque Farouk Hijazi no estaba dentro de la lista de los 55 miembros del régimen iraquí más buscados por las tropas estadounidenses, es considerado un hombre "clave" que podría facilitar información, por ejemplo, sobre algunos operativos de los servicios secretos de Irak. Asimismo, Hijazi tendrá que dar explicaciones a los estadounidenses sobre el complot, en el que parece que participó, para intentar matar al ex presidente George Bush (padre) en 1993, durante una visita a Kuwait del máximo mandatario norteamericano.
Los servicios secretos estadounidenses y kuwaitíes descubrieron un proyecto para atentar contra Bush durante la visita que hizo a Kuwait tras su liberación durante la Guerra del Golfo de 1991. Según los informes, los terroristas harían explotar un automóvil cargado con explosivos a la llegada del mandatario. Si el plan fallaba, otro coche-bomba aparcado haría explosión cerca de un teatro donde Bush recibiría un diploma. En caso de fracaso de la segunda alternativa, y por último, el atentado se consumaría mediante un acto suicida.
Los agentes lograron arrestar a varias personas implicadas en el proyecto y, tras analizar la bomba y escuchar los testimonios de los detenidos, la CIA y el FBI llegaron a la conclusión de que los servicios de inteligencia del régimen de Sadam Husein estaban detrás del intento de asesinato, implicando concretamente a Farouk Hijazi en el complot. Por ello, el ex presidente Bill Clinton ordenó que el cuartel general de los espías iraquíes fuera bombardeado en junio de 1993.
El pasado miércoles 16 de marzo, fuentes de inteligencia estadounidenses confirmaron que Farouk Hijazi había sido visto en Damasco, tras regresar a la capital de Siria desde Túnez, país en el que era el embajador de Irak. Las mismas fuentes explicaron que el ex espía y diplomático había solicitado asilo político al Gobierno de Damasco, según informó la agencia francesa AFP.