LD (EFE) En un comunicado de prensa del Partido de los Trabajadores, el principal órgano de la dictadura comunista de Corea del Norte, Pyongyang exigió compensaciones económicas por la cancelación del proyecto internacional de construcción de dos reactores nucleares de agua ligera.
El texto difundido por la Agencia Central de Noticias (KCNA) afirma que el Gobierno de Washington es "el responsable" de la situación y de la actual crisis en torno al programa de armas nucleares de Corea del Norte. La decisión de construir esos dos reactores de uso pacífico fue resultado del acuerdo marco firmado entre ambos países en 1994, según el cual Pyongyang recibía esas centrales nucleares a cambio de renunciar a su programa destinado a fabricar armas atómicas.
La construcción de los reactores corría a cargo de la Organización para el Desarrollo de la Energía en la Península de Corea (KEDO), formada por patrocinadores internacionales y con un presupuesto de 4.600 millones de dólares (3.833 millones de euros). En octubre de 2002, sin embargo, el régimen norcoreano anunció que había reanudado ese programa nuclear prohibido y, en respuesta, EEUU exigió a la KEDO que suspendiera la construcción de los reactores de agua ligera.