
LD (EFE) En una declaración transmitida por la Agencia Central de Noticias de Corea del Norte (KCNA), un portavoz del Ejército comunista calificó las maniobras militares conjuntas de Corea del Sur y EEUU como un "acto de guerra" que viola el armisticio de 1953 y reclamó el derecho a lanzar ataques disuasorios para garantizar su seguridad.
En las maniobras, llamadas "Ulchi Focus Lens", participan cerca de veinte mil soldados de los dos países, con la movilización incluso de tropas estadounidenses estacionadas en Japón y el archipiélago de Guam. Los ejercicios incluyen maniobras de campo y "juegos de guerra" virtuales mediante computadoras.
Ante lo que considera una amenaza, la dictadura comunista norcoreana despreció la continuidad del único acuerdo que mantiene la precaria paz de la península coreana: el armisticio que en 1953 puso fin a la guerra que durante tres años asoló la península coreana y que enfrentó en este territorio a EEUU, China y la URSS.
En una declaración transmitida por la Agencia Central de Noticias norcoreana (KCNA), un portavoz del Ejército comunista afirmó que Corea del Norte "se reserva el derecho a llevar a cabo acciones preventivas para defenderse de sus enemigos". El desencadenante de esas amenazas norcoreanas fueron las maniobras de doce días en territorio surcoreano, unos ejercicios militares de carácter anual que en esta ocasión coinciden con un clima de máxima tensión en la península.
En el mensaje se advierte de que esos ejercicios convierten en "nulo e inválido" el armisticio de 1953. Según indicó el portavoz norcoreano, "las maniobras constituyen una clara amenaza y un chantaje militar contra nuestra República, y son un acto de guerra que va más allá de la violación del tratado de armisticio. Nadie puede asegurar que (las maniobras) no puedan desembocar en una guerra real".