L D (EFE) El juez Alphonsus Orie, quien leyó la sentencia, manifestó que "(los musulmanes) eran atacados mientras acudían a funerales, en ambulancias, tranvías y autobuses. Les atacaban cuando estaban en los jardines, comprando en los mercados o recogiendo basura en la ciudad. Los niños eran objetivos mientras jugaban o paseaban por las calles".
Al frente del "Cuerpo Rumanía" del Ejército serbobosnio, que rodeó y asedió la ciudad durante dos años, Galic organizó, planificó e instigó toda una campaña cuyo principal objetivo era mantener aterrorizada a la población de la capital bosnia de mayoría musulmana. "Está claro que el general Galic, con sus órdenes, dirigió la campaña de los ataques. Ordenó a sus fuerzas atacar a los civiles de Sarajevo deliberadamente" dijo Orie, que presidía la terna de tres magistrados.
La ciudad de Sarajevo, asediada durante años por más de 18.000 soldados serbobosnios que dejaron a la población sin las necesidades más básicas, se convirtió, junto con Srebrenica, en uno de los principales símbolos de las atrocidades de la guerra de Bosnia (1992-1995). Las imágenes de los heridos y los cuerpos destrozados de decenas de mujeres, ancianos y niños tras el estallido de una granada en el mercado de la ciudad en febrero de 1994 dieron la vuelta al mundo y dejaron constancia de la tragedia que sufrían los musulmanes de la capital bosnia.
Los disparos de los francotiradores hicieron de Sarajevo una ciudad donde se hacía imposible realizar las actividades más normales de la vida diaria. "No se sabe el número exacto de las víctimas civiles. Lo que sí se sabe es que cientos de ciudadanos fueron asesinados y miles resultaron heridos por ataques con bombas y francotiradores" aseguró el magistrado. Con esta sentencia, que considera por primera vez en la historia el crimen de "terror", los magistrados rechazaron los argumentos de la defensa de que las muertes de civiles "eran accidentes colaterales" de unos ataques orientados contra objetivos militares. "Una fracción, pero sólo una fracción pudo ser accidente (...) Hay pruebas de que los civiles fueron deliberadamente atacados por el Cuerpo Rumanía en un gran número de incidentes durante un largo periodo de tiempo y estamos convencidos de que eran parte de una amplia y sistemática campaña", dijeron los jueces.
El juez colombiano que formaba parte de la terna de magistrados, Rafael Nieto Navia, hizo constar su opinión disidente ya que, a su juicio, Galic debería haber sido condenado a 10 años de cárcel. Nieto considera que la Fiscalía no presentó pruebas suficientes de algunos de los ataques de los francotiradores y no encontró datos que avalaran la tesis de que la población civil era el objetivo principal de los soldados.
Las partes disponen ahora de 30 días hábiles para recurrir la sentencia, lo que previsiblemente ocurrirá. La Fiscalía había pedido una condena de cadena perpetua, la pena más alta que contempla el TPIY, mientras que la defensa solicitó la absolución del acusado.