Combates aislados tras la caída de Tikrit, último bastión de Sadam Husein

LD (Agencias) Cuatro personas resultaron muertas en enfrentamientos entre kurdos y árabes que se registran en Tikrit. Varios milicianos que se infiltraron desde el norte iraquí provocaron choques con los árabes residentes en esa ciudad. Una gran columna de humo negro se levanta en la zona este, mientras continúa el sonido de los disparos en diferentes lugares. El corresponsal de Al-Jazeera informó de que “parece que los soldados de EEUU no quieren involucrarse en estos enfrentamientos”. La toma de la localidad natal de Sadam Husein se produjo entre controversias, ya que las tribus de la zona se mostraron dispuestas a pactar la entrega de la ciudad a cambio de que no se permitiese la entrada de kurdos.

Combates aislados se registran en la zona norte de Tikrit, última ciudad iraquí que ha pasado a ser controlada por las fuerzas estadounidenses. Los “marines” que han tomado la localidad natal de Sadam Husein han establecido su base y centro de operaciones y comunicaciones en el palacio del derrocado presidente iraquí. A pesar de que aún parecen quedar focos de resistencia en las afueras del considerado último bastión del régimen de Sadam, el centro está controlado por las fuerzas estadounidenses desde la mañana de este lunes, cuando más de un centenar de vehículos blindados, apoyados por helicópteros y aviones, ocuparon sus calles principales. La sede presidencial es uno de los palacios más lujosos y seguros de los construidos por Husein. Cuenta con una importante red de túneles y pasos subterráneos. Su ubicación en una colina sobre el río Tigris, desde donde se divisa toda la ciudad, y junto al bombardeado puente de hierro por el que se accede a Tikrit por la carretera del norte, que la une a Kirkuk, lo convierte en el punto más estratégico del lugar.

El Palacio, uno de los ocho que Sadam no permitió que fueran visitados por los inspectores de la ONU, se integra en un complejo de unos cuatro kilómetros cuadrados, comprende casas para alojar invitados y haciendas y cuenta con un embarcadero privado, al que sólo se puede acceder por un paso subterráneo. Los soldados estadounidenses se pueden ver por todo el recinto, pero también apostados en diversos puntos clave de Tikrit, como en sus más importantes accesos, donde impiden la entrada a cientos de personas y numerosos vehículos, al parecer habitantes que dejaron la ciudad ante el esperado ataque aliado. Según fuentes militares estadounidenses, se trata de puestos de control levantados para impedir que dirigentes iraquíes y miembros del Ejército y del partido Baaz leales a Husein abandonen la ciudad intentando hacerse pasar por civiles. La intensa presencia de los “marines” mantiene tranquilo el centro de la ciudad, donde reina una aparente calma en las calles, casi desiertas, y se pueden observar muy pocos locales que han sido saqueados, mientras que en las afueras la situación es mucho más confusa.

Los helicópteros “Apache” dispararon al menos ocho misiles contra posiciones iraquíes al norte de Tikrit. Más de veinte explosiones procedentes de una zona del suroeste se han escuchado en lo que parecen ser operaciones para acabar con los últimos focos de resistencia. Un oficial estadounidense dijo que se habían producido intercambios de disparos aislados, pero no pudo confirmar informaciones de que la ocupación fuera precedida por intensos bombardeos de la aviación estadounidense. Según el responsable de Operaciones del Mando Militar central en Qatar, Vincent Brooks, “la resistencia ha sido menor de la esperada”, pues los responsables militares aliados sospechaban que al menos unos 2.500 miembros de la Guardia Republicana y fedayines defenderían a muerte la ciudad natal de Sadam Husein.

El militar informó también de que todos los campos petrolíferos de Irak están bajo control aliado y dijo que los dos pozos de petróleo que ardían en Rumaila (en la frontera sur con Kuwait) ya se han extinguido. Las fuerzas aliadas "tienen bajo control y han asegurado más de 1.000 pozos de petróleo" de la citada localidad, mientras que en Kirkuk, al norte, se descubrió "hace unos días que un pozo está ardiendo". Brooks anunció que procederán a su extinción "tan pronto como sea posible" y dijo que en la zona norte han aumentado el número de efectivos estadounidenses en Mosul, Arbil y Kirkuk. Se refirió también a la creciente cooperación entre la población iraquí y los aliados, que consideró como "fuerzas de liberación" y "no de ocupación" y citó como ejemplo la extinción de un incendio en una refinería de Haditha Dam, donde hubo fuertes combates los días precedentes. Finalmente, se ha informado de que el mando del Ejército iraquí en la provincia de Al-Anbar, en el oeste del país, se ha rendido a las tropas estadounidenses. Se trata de una división de 16.000 hombres que controlaba la región fronteriza con Siria.