LD (EFE) El portavoz de la ONU en Kabul, Manoel de Almeida e Silva, indicó que en el asalto a la sede de Herat, los manifestantes derribaron la puerta del recinto, apedrearon las instalaciones y prendieron fuego al menos a uno de los vehículos que había en el patio, lo que obligó a los trabajadores de la organización internacional a refugiarse en un búnker.
Al menos dos personas han resultado heridas en los enfrentamientos entre manifestantes, que apoyan al gobernador destituido, el "señor de la guerra" Ismail Khan, y las tropas estadounidenses y del Ejército Nacional Afgano, que tratan de imponer el orden en la ciudad, según un comunicado difundido por las autoridades militares de EEUU en Kabul. Pero según testigos, los disturbios han causado al menos dos muertos.
Sayed Mohamed Jair, hasta ahora embajador de Afganistán en Ucrania, que fue designado nuevo gobernador de Herat por el presidente, Hamid Karzai, tomó posesión del cargo en medio de fuertes medidas de seguridad. Khan, según declaraciones difundidas por medios afganos, aceptó la destitución y rechazó el Ministerio de Minería e Industria del Gobierno central de Kabul, un cargo de escasa relevancia en un país asolado por la violencia, donde estas actividades son muy escasas.