Colabora

Chirac, dispuesto a acudir al Consejo de Seguridad para ejercer el derecho de veto de Francia

El presidente francés, Jacques Chirac, baraja asistir a la votación crucial del Consejo de Seguridad sobre el plan estadounidense de ultimátum a Irak, dispuesto a vetarlo si hace falta, aunque no altere la voluntad de Estados Unidos de pasar al ataque.

L D (EFE) Fuentes del Elíseo han señalado que “cuando se decide sobre la muerte o la vida, merece que sea hecho al máximo nivel de responsabilidad. La guerra no es algo menor (...). Parece legítimo que la decisión sea tomada al nivel de los jefes de Estado o de Gobierno”. Chirac, que desde el pasado otoño abandera los esfuerzos por el desarme pacífico de Irak, parece resuelto a ir hasta el final de este pulso con EEUU y sus aliados. “Pase lo que pase, rechazaremos toda resolución que autorice la guerra”, insisten las fuentes, que esgrimen la amenaza de un veto si, en el mercadeo en curso, Washington se hiciera con cinco de los seis votos “indecisos” que necesita en el Consejo de Seguridad para la adopción de su proyecto de resolución que da a Irak hasta el 17 de marzo para desarmarse, so pena de un ataque.

EEUU, el Reino Unido y España (los tres copatrocinadores del ultimátum) tienen garantizado de momento, que se sepa, el voto de Bulgaria. Necesitan cinco más de los seis “indecisos”: México, Chile, Pakistán, Angola, Camerún y Guinea-Conakry. El “frente del rechazo” a la guerra, integrado por Francia, Rusia, China, Alemania y Siria, debe asegurarse dos de los “indecisos” para frustrar el proyecto de ultimátum. Si no, haría falta que Francia, Rusia o China ejercieran su derecho de veto. Precisamente para tratar de evitar que EEUU se haga con el apoyo de los tres países africanos del Consejo, el ministro francés de Exteriores, Dominique de Villepin, emprende este domingo una gira relámpago a Angola, Camerún y Guinea-Conakry. El viaje de Villepin culminará en este último país, que preside este mes el Consejo.

La idea francesa de una cumbre para la votación crucial del Consejo de Seguridad defendida por París como una propuesta hecha “en un espíritu de conciliación, no de agresividad”, parece una respuesta al reto de Bush que quiere forzar a los países a “mostrar su cartas” y revelar “de qué lado está cada uno”. El secretario estadounidense de Estado, Colin Powell, ya indicó el pasado viernes, tras el informe positivo de los inspectores de la ONU sobre el desarme de Irak, que no veía la utilidad de una cumbre. Chirac ha tenido contactos “positivos” con varios líderes sobre la propuesta, según fuentes oficiales, que no identificaron a los contactados, pero el dominical Journal du Dimanche apunta que el canciller alemán, Gerhard Schroeder, y el presidente ruso, Vladimir Putin, podrían hacer el viaje con él a Nueva York.

Temas

Ver los comentarios Ocultar los comentarios

Portada

Suscríbete a nuestro boletín diario