L D (EFE) Los policías, que se comunicaban entre sí con walkie-talkies, impidieron tomar fotos de los soldados cambiando de turno junto al célebre retrato de Mao Zedong que preside la plaza en su parte norte. Las medidas de seguridad aumentaron para entrar en la plaza con controles de escáner a los bolsos, análisis de cualquier botellín que llevaran los visitantes, y petición de pasaporte a todo aquel extranjero que intentara entrar al recinto.
La plaza, una de las atracciones turísticas más visitadas por los ciudadanos chinos, no tenía este jueves ninguno de los habituales puestos de fotografías de recuerdo o de bebidas, pese al intenso calor. Sí había en cambio un aumento de policías y fuerzas del orden, además de furgones negros o automóviles sin matricula controlando todos los accesos y calles cercanas a la plaza.
Los periodistas condenan las restricciones
El Club de Corresponsales Extranjeros en China (FCCC) condenó las restricciones que muchos reporteros han sufrido al intentar cubrir el vigésimo aniversario de la matanza de Tiananmen, ocurrida en la noche del 3 al 4 de junio de 1989. En un comunicado, FCCC citó como ejemplo la expulsión de al menos cuatro televisiones extranjeras que intentaron grabar imágenes en la plaza pequinesa que da nombre a la masacre, perpetrada por el Ejército chino y en la que murieron entre unos 2.000 manifestantes.
Además, un reportero sufrió agresiones cuando intentaba entrevistar a madres de las víctimas de la matanza, hechos todos ellos que, según FCCC, violan el espíritu de la regulación que China aplica a los periodistas extranjeros. Por otro lado, se han registrado, como en otras ocasiones, cortes de emisión en canales como la británica BBC o la estadounidense CNN cuando se mencionó la matanza en sus informativos.
"Por tercera vez este año, las promesas de apertura a los medios se han visto comprometidas por un aniversario políticamente sensible", destacó el presidente de FCCC, Jonathan Watts, refiriéndose también a las dificultades que hubo para cubrir el primer aniversario de las revueltas en el Tíbet (marzo) y el terremoto de Sichuan (mayo).