La Asamblea Nacional venezolana aprobó en la sesión del viernes una nueva ley electoral que la oposición ya ha denunciado porque beneficiaría al partido del presidente Hugo Chávez, quien partiría con ventaja en un nuevo escenario cercano a un sistema de reparto mayoritario y en el que cabrían las revisiones interesadas de las circunscripciones electorales.
La denominada Ley Orgánica de Procesos Electorales fue aprobada con algunas modificaciones, por los que corresponderá a la Comisión de Participación Ciudadana redactar el informe para su lectura en pleno, y aún resta la luz verde del Ejecutivo y su publicación para entrar en vigor, según informaciones de medios locales.
El texto establece un sistema mediante el que el partido más votado se llevará más porcentaje de escaños que el que le correspondería en la actualidad, lo que perjudica a las minorías y beneficia al Partido Socialista Unido de Venezuela de Chávez.
El diputado opositor Ricardo Gutiérrez tachó de "zarpazo" a las libertades y derechos políticos la nueva norma, ya que a su juicio representa "una regresión al viejo sistema de partidos y planchas cerradas".
La oposición alega que la Constitución defiende por ley a las minorías, algo que según la presidenta de la Asamblea, Cilia Flores, no queda en entredicho con la nueva ley. "Cuando se refiere a las minorías, la Constitución se refiere a las minorías excluidas, a los indígenas (...) y nunca a los partidos políticos", explicó. "Esta ley está reconociendo a la población, al pueblo y a todos los sectores que son en los que reside la soberanía".
Además, la oposición se queja de que la normativa propuesta deja en manos del oficialismo la posibilidad de modificar las circunscripciones electorales en su propio interés, actuando contra los feudos de la oposición.