LD (Agencias) En una rueda de prensa celebrada en la capital cubana, Chávez anunció que si el nuevo Consejo Nacional Electoral (CNE) de Venezuela aceptara la validez de las firmas recogidas por la oposición para demandar el referendo, se convertiría en un "elemento desestabilizador" y quedaría "inhabilitado moralmente, ni siquiera capacitado para elegir a Miss Venezuela". Agregó que "si tomara esa decisión (el Consejo), supuesto negado para mí, a los venezolanos que apoyan al Gobierno les queda la decisión constitucional de apelar al Tribunal Supremo de Justicia, que tiene una Sala Electoral". Si la Sala Electoral aún respaldara la decisión del Consejo Nacional Electoral, añadió Chávez, "a cualquier venezolano, incluyéndome a mí" le quedaría el recurso de acudir a la Sala Constitucional del Supremo.
Según el presidente de Venezuela, con esta actitud su gobierno no incumple ningún mandato constitucional, ya que las firmas recogidas por la oposición son "ilegales", "falsas" y fueron reunidas por "una empresa privada perteneciente a los opositores", sin verificación de las autoridades electorales. "Tenemos pruebas de que hicieron fraude", afirmó el mandatario, que explicó que la oposición "transmitió firmas electrónicamente de algunos bancos de su propiedad" e incluyó las firmas de "muertos" en la lista.
La supuesta falsedad de las firmas "podría ser cuerpo de uno o varios delitos", advirtió el presidente, que acusó a la oposición de participar en el "juego desestabilizador" del país. "Si la oposición quiere referéndum, tendrá que recoger firmas una vez que el Consejo Nacional Electoral apruebe la pregunta y reglamente el proceso para un referéndum revocatorio", declaró.
Según el presidente de Venezuela, con esta actitud su gobierno no incumple ningún mandato constitucional, ya que las firmas recogidas por la oposición son "ilegales", "falsas" y fueron reunidas por "una empresa privada perteneciente a los opositores", sin verificación de las autoridades electorales. "Tenemos pruebas de que hicieron fraude", afirmó el mandatario, que explicó que la oposición "transmitió firmas electrónicamente de algunos bancos de su propiedad" e incluyó las firmas de "muertos" en la lista.
La supuesta falsedad de las firmas "podría ser cuerpo de uno o varios delitos", advirtió el presidente, que acusó a la oposición de participar en el "juego desestabilizador" del país. "Si la oposición quiere referéndum, tendrá que recoger firmas una vez que el Consejo Nacional Electoral apruebe la pregunta y reglamente el proceso para un referéndum revocatorio", declaró.