LD (Agencias) Autoridades diplomáticas españolas entregarán este jueves al Gobierno cubano las llaves del Palacio de las Cariátides, sede del Centro Cultural de España en La Habana. El cierre es la primera sanción administrativa que el régimen de Fidel Castro impone a un país europeo desde que la Unión Europea dictara el pasado cinco de junio cuatro medidas contra las autoridades cubanas -entre ellas la reducción de la participación europea en actividades culturales- debido al encarcelamiento de 75 disidentes cubanos y la ejecución de tres secuestradores de una lancha de pasajeros.
El Gobierno castrista señaló directamente a los gobiernos de España e Italia de ser los impulsores de la medida. El pasado catorce de junio, el Ministerio cubano de Asuntos Exteriores confirmó el fin de los acuerdos suscritos con España en 1995 y 2002 para el establecimiento del Centro Cultural Español en La Habana. “El Acta suscrita por ambos gobiernos planteaba que el Centro se creaba para difundir los mejores valores de la cultura española 'sobre la base del respeto a la soberanía, la integridad territorial y la no injerencia en los asuntos internos' de Cuba. Lejos de promover la cultura española en nuestro país, objetivo para el cual fue creado, (el Centro) ha mantenido un programa de actividades no relacionadas con su función original, en abierto desafío a las leyes y las instituciones cubanas”, recordó la declaración de la cancillería cubana en ese momento.
El Centro Cultural fue creado en 1995 y ubicado en la Casa de las Cariátides, sobre el Malecón habanero, tras la rehabilitación del edificio, financiada por la administración española, que ha invertido en reformas, equipamiento y programación cerca de 3,9 millones de dólares en estos años. El convenio de creación, firmado entre los gobiernos de Cuba y España, tenía una vigencia de veinte años, salvo denuncia previa por cualquiera de las partes por vía diplomática, que daría paso a la ruptura del acuerdo en un plazo de noventas días. El local se convertirá en el Centro Cultural Federico García Lorca, “en justo homenaje a uno de los más grandes poetas y dramaturgos españoles, brutalmente fusilado por el fascismo en 1936”, precisó la declaración cubana.
En agosto pasado, el Centro Cultural clausuró sus actividades en la isla con una gran fiesta a la que asistieron centenares de personas, según testigos presenciales. La decisión de la UE de reducir su presencia en actividades culturales en Cuba está afectando la celebración de varias actividades previstas, como la Bienal de La Habana, el Festival de Cine Latinoamericano y la Feria Internacional del Libro, indicaron fuentes oficiales. Para las autoridades españolas, la institución se limitó a proyectar una imagen actual de España y fomentar las relaciones institucionales en el ámbito cultural, convirtiéndose en un instrumento de difusión para las culturas de ambos países.
Inaugurado en 1997, era la única institución de sus características en Cuba y formaba parte de las 36 que componen la Red de Centros y Oficinas Culturales de la Agencia de Cooperación Española. Sus más de 2.000 metros cuadrados de superficie albergaban una sala de actos con capacidad para cien personas, un área de exposiciones, biblioteca, hemeroteca y fonoteca. Por sus salas han pasado más de un centenar de figuras del arte y de la cultura de España y de Cuba.
El Gobierno castrista señaló directamente a los gobiernos de España e Italia de ser los impulsores de la medida. El pasado catorce de junio, el Ministerio cubano de Asuntos Exteriores confirmó el fin de los acuerdos suscritos con España en 1995 y 2002 para el establecimiento del Centro Cultural Español en La Habana. “El Acta suscrita por ambos gobiernos planteaba que el Centro se creaba para difundir los mejores valores de la cultura española 'sobre la base del respeto a la soberanía, la integridad territorial y la no injerencia en los asuntos internos' de Cuba. Lejos de promover la cultura española en nuestro país, objetivo para el cual fue creado, (el Centro) ha mantenido un programa de actividades no relacionadas con su función original, en abierto desafío a las leyes y las instituciones cubanas”, recordó la declaración de la cancillería cubana en ese momento.
El Centro Cultural fue creado en 1995 y ubicado en la Casa de las Cariátides, sobre el Malecón habanero, tras la rehabilitación del edificio, financiada por la administración española, que ha invertido en reformas, equipamiento y programación cerca de 3,9 millones de dólares en estos años. El convenio de creación, firmado entre los gobiernos de Cuba y España, tenía una vigencia de veinte años, salvo denuncia previa por cualquiera de las partes por vía diplomática, que daría paso a la ruptura del acuerdo en un plazo de noventas días. El local se convertirá en el Centro Cultural Federico García Lorca, “en justo homenaje a uno de los más grandes poetas y dramaturgos españoles, brutalmente fusilado por el fascismo en 1936”, precisó la declaración cubana.
En agosto pasado, el Centro Cultural clausuró sus actividades en la isla con una gran fiesta a la que asistieron centenares de personas, según testigos presenciales. La decisión de la UE de reducir su presencia en actividades culturales en Cuba está afectando la celebración de varias actividades previstas, como la Bienal de La Habana, el Festival de Cine Latinoamericano y la Feria Internacional del Libro, indicaron fuentes oficiales. Para las autoridades españolas, la institución se limitó a proyectar una imagen actual de España y fomentar las relaciones institucionales en el ámbito cultural, convirtiéndose en un instrumento de difusión para las culturas de ambos países.
Inaugurado en 1997, era la única institución de sus características en Cuba y formaba parte de las 36 que componen la Red de Centros y Oficinas Culturales de la Agencia de Cooperación Española. Sus más de 2.000 metros cuadrados de superficie albergaban una sala de actos con capacidad para cien personas, un área de exposiciones, biblioteca, hemeroteca y fonoteca. Por sus salas han pasado más de un centenar de figuras del arte y de la cultura de España y de Cuba.