LD (EFE) George Bush, el presidente de EEUU, advirtió que interceptaría cualquier intento de Corea del Norte de transferir armamento o tecnología nuclear a Irán o la red terrorista Al-Qaeda. En tal caso, subrayó al régimen comunista de Pyongyang, deberá afrontar graves consecuencias.
El mandatario no quiso especificar en qué consistiría la respuesta estadounidense y sólo quiso decir que "lo tendremos que tener en cuenta". Añadió que "si descubrimos que se disponen a vender un arma nuclear detendremos la transferencia y nos ocuparemos del barco o el avión que transporte el artefacto".
Por su parte y antes de partir de Japón a Corea del Sur, la secretaria de Estado de EEUU, Condoleezza Rice advirtió también que el Gobierno al que pertenece tomará más medidas en caso de un segundo ensayo nuclear norcoreano. En sus declaraciones a la prensa tampoco quiso entrar en detalles sobre el tipo de castigo que se impondría a Pyongyang.
EEUU ha suministrado esta semana a Japón y Corea del Sur información sobre movimientos sospechosos de vehículos y personas en territorio norcoreano, detectados por satélites, que hacen temer que la dictadura de Kim Jong-il pueda estar preparando una segunda prueba nuclear. Rice ha emprendido una ofensiva diplomática para obtener el compromiso de Japón, Corea del Sur y China en la aplicación de las sanciones impuestas a Pyongyang por el Consejo de Seguridad de la ONU.
La resolución aprobada el pasado sábado exige al régimen norcoreano la suspensión inmediata de sus actividades nucleares y prohíbe la venta o transferencia a Pyongyang de cualquier tipo de material relacionado con armas "no convencionales". También establece el bloqueo aéreo, la prohibición de vender artículos de lujo a Corea del Norte y el embargo de las cuentas en el extranjero de los dignatarios norcoreanos.