
(Libertad Digital) El presidente George W. Bush, pronunció el lunes por la noche su séptimo discurso sobre el "Estado de la Unión" y el último antes de abandonar la Casa Blanca en enero de 2009.
Pese a que Irak fue el asunto al que más tiempo dedicó el presidente norteamericano, también, dejó un espacio destacado para la economía, el tema que más preocupa a los electores estadounidenses en está campaña.
George W. Bush se dirigió a las dos cámaras para que hagan "permanente" el recorte de las tarifas fiscales. E hizo una clara alusión a la "desaceleración" de la economía norteamericana a corto plazo, pero "a largo plazo" apeló a la confianza "en la fortaleza" de la misma.
El presidente norteamericano vio interrumpida su intervención en unas 70 ocasiones debido al aplauso de los legisladores y contó con dos espectadoras poco habituales en este tipo de actos, sus hijas gemelas, Jenna y Bárbara.
Respecto a Irak, el presidente George W. Bush aseguró que tras el 11-S, en EEUU "hemos luchado contra los extremistas y los terroristas". Y defendió el polémico envío de tropas que comenzó en enero de 2007 y que ha permitido lograr "resultados inimaginables hace un año".
George W. Bush, no obstante, recordó que 20.000 efectivos volverán a casa en los próximos meses. No quiso poner un calendario para la retirada de Irak pues volvió a repetir que una salida precipitada puede desencadenar el desastre.
"Miembros del Congreso -dijo Bush- habiendo ido tan lejos y habiendo conseguido tanto, no podemos consentir que esto (el caos en Irak) ocurra". El mandatario necesita que el Congreso le autorice 70.000 de dólares adicionales para las operaciones militares en Irak y Afganistán.
"Hemos afrontado decisiones difíciles sobre la paz y la guerra, el incremento de la competitividad en la economía global y, sobre la salud y el bienestar de nuestros ciudadanos", dijo Bush. "Estos asuntos traen vigorosos debates, y creo que es honesto decir que hemos respondido a ellos. Ahora la Historia recordará que entre las diferencias, nosotros actuamos con un objetivo".
Los democratas respondieron al discurso diciendo que el presidente norteamericano había ofrecido poco más que "el status quo".
Irán , transparencia
El presidente tuvo también unas palabras para el régimen teocrático de Irán y se dirigió directamente a la sociedad civil pero también a sus líderes: "Ser claros sobre vuestras intenciones nucleares y acciones pasadas, acabar con la opresión en casa y terminar con el apoyo del terrorismo en el exterior".