L D (Agencias) En el marco de la cumbre del Grupo de los Siete países más industrializados del mundo más Rusia, el presidente de EEUU y el de Francia han tratado de limar asperezas tras sus posturas encontradas durante la crisis de Irak. Los dos mandatarios han celebrado un encuentro bilateral, el primero tras la crisis iraquí, y ante las cámaras, George Bush ha dicho que "podemos tener desacuerdos", pero "no significa" que “haya que ser desagradables el uno con el otro”. El mandatario estadounidense destacó que, aunque las posturas de ambos países se mantienen, se "puede decir que tenemos una buena relación de amigos".
Jacques Chirac, por su parte, deseó éxito a Bush en sus reuniones en Oriente Medio, y expresó un apoyo "sin reservas" a sus intentos para impulsar el proceso de paz. Sobre esta cuestión, el mandatario dijo que pedirá a las partes implicadas en el proceso de paz "que asuman sus responsabilidades para lograr la paz" en la región. Desde la ciudad francesa de Evian, donde participa en la cumbre del G8 (países industrializados, más Rusia), Bush viajará a Sharm el Sheij, en Egipto, y el miércoles se dirigirá a Aqaba (Jordania) para dos reuniones dedicadas a impulsar el proceso de paz de Oriente Medio. "Mi expectativa es llamar a todas las partes a que asuman sus responsabilidades para lograr la paz", dijo Bush en sus breves declaraciones junto a Chirac, para reconocer a continuación que el camino para alcanzar los objetivos de paz en Oriente Medio "va a ser un proceso difícil y tenemos que trabajar con nuestros amigos".
Bush consideró "cumplidas" las expectativas que tenía para esta cumbre del G8, que abandonará este mismo lunes, un día antes de su conclusión. Chirac lamentó que Bush tuviera que irse antes del fin de la cumbre, pero señaló que es por "la causa de la paz" en Oriente Medio, a la que "todos estamos muy apegados", y le deseó todo el éxito posible en sus reuniones en la región. Tras el encuentro con Bush, que tuvo lugar después de una sesión del G8 sobre economía y comercio, Chirac se reunió con su colega ruso, Vladmir Putin. Antes de la reunión de los ocho líderes sobre los aspectos económicos, Chirac, Bush y el canciller alemán, Gerhard Schroeder, habían mantenido una breve reunión tripartita.
Francia, junto a Alemania y Rusia, abanderaron la oposición a la guerra contra Irak durante meses, pero el mes pasado votaron a favor de la resolución 1.483 de la ONU sobre la posguerra, que da a EEUU y el Reino Unido el control político y económico de Irak hasta la formación de un gobierno iraquí reconocido internacionalmente.
Jacques Chirac, por su parte, deseó éxito a Bush en sus reuniones en Oriente Medio, y expresó un apoyo "sin reservas" a sus intentos para impulsar el proceso de paz. Sobre esta cuestión, el mandatario dijo que pedirá a las partes implicadas en el proceso de paz "que asuman sus responsabilidades para lograr la paz" en la región. Desde la ciudad francesa de Evian, donde participa en la cumbre del G8 (países industrializados, más Rusia), Bush viajará a Sharm el Sheij, en Egipto, y el miércoles se dirigirá a Aqaba (Jordania) para dos reuniones dedicadas a impulsar el proceso de paz de Oriente Medio. "Mi expectativa es llamar a todas las partes a que asuman sus responsabilidades para lograr la paz", dijo Bush en sus breves declaraciones junto a Chirac, para reconocer a continuación que el camino para alcanzar los objetivos de paz en Oriente Medio "va a ser un proceso difícil y tenemos que trabajar con nuestros amigos".
Bush consideró "cumplidas" las expectativas que tenía para esta cumbre del G8, que abandonará este mismo lunes, un día antes de su conclusión. Chirac lamentó que Bush tuviera que irse antes del fin de la cumbre, pero señaló que es por "la causa de la paz" en Oriente Medio, a la que "todos estamos muy apegados", y le deseó todo el éxito posible en sus reuniones en la región. Tras el encuentro con Bush, que tuvo lugar después de una sesión del G8 sobre economía y comercio, Chirac se reunió con su colega ruso, Vladmir Putin. Antes de la reunión de los ocho líderes sobre los aspectos económicos, Chirac, Bush y el canciller alemán, Gerhard Schroeder, habían mantenido una breve reunión tripartita.
Francia, junto a Alemania y Rusia, abanderaron la oposición a la guerra contra Irak durante meses, pero el mes pasado votaron a favor de la resolución 1.483 de la ONU sobre la posguerra, que da a EEUU y el Reino Unido el control político y económico de Irak hasta la formación de un gobierno iraquí reconocido internacionalmente.