LD (EFE) En una entrevista publicada en la edición electrónica de la revista Istoé Dinheiro, Fernanda Karina Ramos, la ex secretaria de Marcos Valerio, publicista del Partido de los Trabajadores, denunció que entre 2003 y 2004 vio "salir millones en efectivo" de la oficina de su antiguo jefe.
Valerio es la persona a quien el diputado Roberto Jefferson ha acusado de pertenecer a una red de corruptelas mediante la cual el PT sobornaba legisladores a cambio de apoyo al Gobierno de Luiz Inácio Lula da Silva.
Ramos, que confesó haber votado siempre al PT, dijo que vio "hasta un millón de reales (unos 400.000 dólares) en efectivo dentro de maletas", talo y como Jefferson mantiene que llegaba a Brasilia el dinero de los sobornos. La ex empleada aseguró que la mayoría del dinero procedía del Banco Rural, una institución pública que Jefferson denunció que, junto con el también estatal Banco do Brasil y empresas privadas, aportaban los recursos para sobornar a los parlamentarios.
La entrevista fue difundida por Internet mientras Jefferson era interpelado por el Consejo de Ética de la Cámara Baja, acusado de hacer denuncias de tal gravedad sin prueba alguna, como él mismo ha reconocido. El propio Jefferson recibió y leyó parte de la entrevista mientras era interpelado y uno de los diputados, en medio del griterío general, pidió protección policial para Ramos por considerar que "puede correr riesgo de muerte, porque dice tener una agenda y documentos importantes".