LD (EFE) Una encuesta electoral elaborada para el periódico británico Financial Times refleja que el Partido Laborista mantiene una ventaja de diez puntos sobre los conservadores en la intención de voto para las elecciones de este jueves en el Reino Unido, distancia que podría verse, sin embargo, afectada en el último momento por el alto porcentaje de indecisos.
Según el estudio, un 36 por ciento de los encuestados admite que podría cambiar el sentido de su voto en las últimas cuarenta y ocho horas, porcentaje mucho más alto que el registrado en las anteriores elecciones de 1997 y 2001, cuando sólo un 21 por ciento se mostró indeciso a la misma altura de la campaña.
La encuesta desvela que un 39 por ciento de los entrevistados que afirma que votará el jueves lo hará por los laboristas, un 29 por ciento votará por los conservadores y un 22 por ciento optará por los liberales demócratas.
Para los conservadores, los nuevos índices de intención de voto representa una caída del cinco por ciento con respecto a hace una semana y el nivel más bajo de apoyo a ese partido desde el pasado octubre. En la interpretación del periódico, uno de los factores que pueden haber contribuido a esa fuerte caída en el favor del electorado son los ataques personales del líder conservador, Michael Howard, contra el primer ministro, Tony Blair, acusándole de "mentiroso" por la guerra de Irak.
El alto número de indecisos parece estar al mismo tiempo relacionado con la polémica en torno a la legalidad de la guerra de Irak, puesta en duda por el propio asesor legal del Gobierno, según se ha revelado últimamente. Los laboristas temen que el descontento con el papel de Blair en esa guerra disuada a muchos británicos que han votado tradicionalmente a ese partido y que esta vez podrían quedarse en casa o votar al Partido Liberal Demócrata, el único que se opuso desde el principio a la invasión del país árabe.