Blair reafirma que cooperará plenamente con el juez independiente que llevará el “caso Kelly”

LD (Agencias) En declaraciones a la prensa británica en Shaingai, China, Blair negó que hubiera autorizado la identificación pública del experto del ministerio de Defensa David Kelly, como "fuente principal" de la BBC , en el centro de una polémica con el Gobierno por sus informaciones sobre Irak. Horas antes, el primer ministro británico ha reafirmado brevemente que está dispuesto a cooperar plenamente con el juez James Brian Hutton, quien estará a cargo de la investigación “caso Kelly”. Tony Blair manifestó: “haré lo que el juez competente quiera que haga. Cooperaré con él por completo”. Cuestionado sobre si está dispuesto a declarar ante Hutton en público, Blair dijo que “eso depende de él”. En su primera declaración, el magistrado prometió una investigación rápida y, en su mayor parte, pública. En un gesto de independencia, Hutton también resaltó que “seré yo quien decida, de acuerdo con mis limites, qué asuntos serán objeto de mis pesquisas” para esclarecer las circunstancias que rodearon la muerte del asesor del Ministerio de Defensa, David Kelly, cuyo cuerpo fue encontrado el viernes con las venas de las muñeca izquierda cortadas.

Los partidos de oposición, junto con los laboristas, han reclamado al juez que investigue también el uso de los datos e informes de inteligencia por parte del Gobierno para justificar la guerra en Irak. Por ejemplo, el líder liberal Charles Kennedy apuntó que “para llegar al fondo de esta tragedia, lord Hutton deberá tocar aspectos como los argumentos del Gobierno a favor de la guerra, la veracidad de la información de inteligencia y el uso por parte del Gobierno de esos datos”. Robin Cook, el ex ministro que dimitió poco antes de la invasión, apuntó que será imposible que Hutton llegue al fondo de la investigación si no entra a valorar las razones que tenía el Gobierno para intervenir contra el régimen iraquí. Antes de volar de Pekín a Shangai, Blair especificó que “es importante que (el juez Hutton) haga lo que le hemos pedido que haga” para esclarecer la muerte de Kelly.

Varios analistas han señalado que el “caso Kelly” terminará por afectar la credibilidad de la BBC , quien aceptó que el asesor había sido su principal fuente de información en la serie de programas en donde se acusó al Gobierno de haber exagerado sus informes sobre armamento iraquí. Por ello, Blair dejó en claro desde la capital china que “no me arrepiento (de la intervención) no tengo ninguna duda de que Irak estaba intentando desarrollar armamento de destrucción masiva, y creo que se actuó correctamente, pese a las dificultades que supuso”. En cambio, dejó entrever y sin señalar a nadie, que quien había incurrido en “errores”, había sido la cadena pública.

En ese contexto, la mayor parte de los medios de comunicación británicos están presionando para que los directivos de la cadena renuncien después de conocerse que no aceptaron una “tregua” propuesta por el Gobierno, la cual pudo haber salvado al asesor. Además, se cuestiona la forma en que el periodista responsable de la información que provocó el enfrentamiento con Blair, Andrew Gilligan, manejó los datos proporcionados por el biólogo y si fue correcto en sus apreciaciones. Poco antes de su muerte, el doctor Kelly, un experto en armas, había negado que los comentarios que le realizó al reportero equivalían a una acusación de que el Gobierno británico había manipulado el material de inteligencia. Sin embargo en un comunicado, la BBC defendió su informe, asegurando que no había malinterpretado las palabras del asesor de armas.