LD (EFE) En una entrevista concedida al periódico Financial Times, el primer ministro británico, Tony Blair, evita dar por "muerta" la Constitución europea, ya que el documento aún supone "un camino razonable para seguir adelante" para la Unión Europea.
Antes de volar a Washington, donde se encuentra actualmente, Blair afirma que "en algún momento Europa va a tener que adoptar reglas" para su futuro y advierte de que "si no lo hace, no va a funcionar como es debido. No le corresponde a Gran Bretaña declarar que la Constitución se ha muerto".
El primer ministro, cuyo Gobierno anunció el aplazamiento indefinida del referéndum británico sobre la Carta Magna europea, previsto en principio para la primavera próxima, considera que el doble "no" de franceses y holandeses debe suscitar un profundo debate en toda Europa sobre el futuro del modelo económico y social de la UE, debate que debe responder a los profundos temores expresados por esos dos pueblos en sus campañas en torno al referéndum.
En su opinión, muchos líderes de la UE reconocen en privado que sería absurdo seguir como si no hubiese pasado nada en Francia y Holanda, pero no lo dicen abiertamente. Al mismo tiempo, asegura que, frente a lo que hayan podido creer algunos, su Gobierno no defiende la posición contraria, que consistiría en tirar por la borda la Constitución.