Silvio Berlusconi ha dicho que "no hay nada de sencillo en el trabajo del primer ministro" pero que "hago lo que hago con un sentido de sacrificio. Realmente no me gusta. No, en absoluto".
Además, añadió que "muy a menudo hay una gran cantidad de trabajo sucio, pero es realmente la prensa amarilla, peor que eso, es vergonzoso y enfermizo". Il Cavaliere se considera todo un héroe porque " Es una vida difícil, la responsabilidad de dirigir el gobierno en un país como Italia".
En una amplia entrevista con CNN, Paula Newton, Berlusconi también discutió algunas polémicas declaraciones suyas, como llamar al presidente de EEUU "curtido". Negó en redondo que el comentario fuera una metedura de pata.
Y va más allá: "Nunca he cometido ninguna metedura de pata, ni siquiera una. Cada metida de pata se la inventan los periódicos".
Incluso llegó a hacer revelaciones, que muchos ya han puesto en duda: "Siempre pienso antes de hablar. Yo cuento historias y cuento chistes. Siempre soy consciente de lo que estamos hablando.", aseguró.
El multimillonario magnate de los medios de comunicación convertida en político, también culpa a los medios de comunicación italianos de romper el matrimonio con su segunda esposa y madre de tres de sus cinco hijos, Veronica Lario. Dijo que ella cometió un error al creer lo que decían los periódicos italianos.
Por otro lado, formuló una especie de sentencia, que consideró una visión de futuro: "Voy a tener todos los italianos conmigo y las acusaciones serán un boomerang contra los las han hecho contra mí".