L D (EFE) Berger, de 57 años, y Colom, de 52, se disputaron la Presidencia en la segunda vuelta al haber sido los dos candidatos más votados de los once que compitieron por la Presidencia en las elecciones generales del 9 de noviembre.
La participación en la segunda vuelta de las elecciones fue del 46,78 por ciento, precisó Bolaños, 11,12 puntos menos que en los comicios de noviembre.
En total participaron 2.373.469 guatemaltecos, de los cuales 1.235.303 votaron por Berger, 1.046.868 por Colom, en tanto que 24.192 dejaron la papeleta en blanco, y 7.106 la anularon. En su primera rueda de prensa como presidente electo, Berger aseguró que su gobierno no será excluyente, combatirá la pobreza, el crimen organizado y la impunidad, y cumplirá con las promesas que hizo a los diversos sectores sociales durante la campaña electoral.
Además, invitó a la Premio Nobel de la Paz de 1992, Rigoberta Menchú, y a Colom a participar activamente en su administración. Sin embargo, Colom, al reconocer su derrota en las urnas, rechazó formar parte del gobierno de Berger y aseguró que se convertirá en el principal dirigente de la oposición. "Hay que dejarlos gobernar tranquilos. Ellos tienen equipos suficientes" para ello, subrayó Colom.
Además, aseguró que se mantendrá "vigilante de que no se haga daño al más del millones de guatemaltecos que votaron por nosotros, principalmente a los pobres". Berger sustituirá en el cargo el próximo 14 de enero al presidente Alfonso Portillo, para un mandato de cuatro años.
En total participaron 2.373.469 guatemaltecos, de los cuales 1.235.303 votaron por Berger, 1.046.868 por Colom, en tanto que 24.192 dejaron la papeleta en blanco, y 7.106 la anularon. En su primera rueda de prensa como presidente electo, Berger aseguró que su gobierno no será excluyente, combatirá la pobreza, el crimen organizado y la impunidad, y cumplirá con las promesas que hizo a los diversos sectores sociales durante la campaña electoral.
Además, invitó a la Premio Nobel de la Paz de 1992, Rigoberta Menchú, y a Colom a participar activamente en su administración. Sin embargo, Colom, al reconocer su derrota en las urnas, rechazó formar parte del gobierno de Berger y aseguró que se convertirá en el principal dirigente de la oposición. "Hay que dejarlos gobernar tranquilos. Ellos tienen equipos suficientes" para ello, subrayó Colom.
Además, aseguró que se mantendrá "vigilante de que no se haga daño al más del millones de guatemaltecos que votaron por nosotros, principalmente a los pobres". Berger sustituirá en el cargo el próximo 14 de enero al presidente Alfonso Portillo, para un mandato de cuatro años.