A nadie se le ha escapado que Hugo Chávez ha hecho una visita oficial a Leonel Fernández, que hace unos meses fue designado para mediar en la crisis entre Venezuela y Colombia, con intenciones muy bien marcadas pese a que el objetivo "oficial" del viaje era firmar una serie de acuerdos energéticos.
Durante la rueda de prensa en el que anunció estos acuerdos, Chávez se defendió de la oposición venezolana que le llamó "Don Regalón", por todo el petróleo del país que reparte en el mundo a precios muy convenientes para los demás. Dijo que eso a él no le importaba y subrayó, en su acostumbrado tono populista, que en realidad el gran beneficiado era el pueblo. Entre los acuerdos firmados está la compra del 49% de las acciones de la Refinería Dominicana de Petróleo (Refidomsa), que produce todo el combustible que se consume en el país.
Mediación y elogios
Como no podía ser de otra manera, Chávez pidió durante su intervención que todos los dominicanos se pusieran de pie para aplaudir a su presidente por los acuerdos que habían firmado los dos presidentes. Leonel Fernández no se quedó atrás y dijo que Venezuela "está demostrando al mundo una visión donde predomina la ética, la cooperación, la fraternidad, la humanización. Lo felicito por este aporte que hace su Gobierno y usted para encauzar los vínculos de su Gobierno".
Además, el venezolano agradeció a Fernández "por tus esfuerzos en el tema de Venezuela y Colombia que no han sido en vano y no serán en vano. Gracias Leonel, gracias" y agregó que "tu labor ha sido extraordinaria y seguirá siendo extraordinaria en la búsqueda de la armonía".