LD (EFE) Las tropas estadounidense y las fuerzas de seguridad iraquíes han acelerado en las últimas semanas su campaña contra los terroristas suníes en distintos puntos del país con el fin de calmar la situación y permitir la celebración de los comicios a tiempo. Este martes, unidades de infantería, apoyadas por helicópteros, se enfrentaron con terroristas en Faluya. La aviación y la artillería estadounidenses también volvieron a bombardear poco después de caer la noche los distritos occidentales de Al-Askary y Al-Shuhada, dijeron testigos en la ciudad.
Los nuevos ataques aéreos sobre esa ciudad se produjeron pocas horas después de los que tuvieron como objetivo un restaurante y un edificio en el centro de Faluya y causaron la muerte de seis personas. El mando militar estadounidense, que confirmó los ataques sin informar de víctimas, cree que en Faluya se esconden los partidarios del prófugo terrorista jordano Abu Musaba al-Zarqawi, líder de la red Al-Qaeda en Irak.
Mientras tanto y mediante una "fatwa" (dictámen religioso con carácter de ley) divulgada en la ciudad santa de Nayaf, en el sur del país, el anciano clérigo chií Alí al-Ssistani, recomendó a todos los iraquíes que se registren en los centros electorales que se abrirán para tal efecto. Se comprometió a apoyar un proceso al que en un principio se oponía después de que se aceptara, en parte, su deseo de que se realizara bajo la premisa "un hombre, un voto", que casi le garantizaría la victoria a los chiíes, ya que suponen el 58 por ciento de la población iraquí.