Argentina ordena a su Ejército que arreste a diez oficiales acusados de crímenes contra la humanidad

LD (Agencias) El ministro de Defensa, José Pampurro, "puso en conocimiento" la orden de arresto al Estado Mayor General del Ejército "y se cumplimentará lo dispuesto por el magistrado actuante", informó esa cartera en un escueto comunicado. El juez federal Carlos Skidelsky, de la provincia norteña de Chaco, ordenó el pasado martes por la noche la detención de diez oficiales del Ejército, tres de ellos coroneles en actividad, en la causa por el fusilamiento de 22 presos políticos el 13 de diciembre de 1976 en la localidad de Margarita Belén.

El magistrado dijo que esa orden de captura es "el primer paso" de la investigación, pues sostuvo que, a partir de la indagatoria de los militares que ordenó arrestar, avanzará hacia "los autores intelectuales" de los fusilamientos. Los organismos de derechos humanos han acusado como instigador de lo que se conoce como "La masacre de Margarita Belén" al general Ricardo Brinzoni, cesado como jefe del Ejército y pasado a retiro a finales de mayo por el presidente argentino, Néstor Kirchner, en una de sus primeras medidas de gobierno.

La orden de captura dictada por el juez federal comprende a los coroneles en actividad Horacio Losito, agregado militar de la Embajada argentina en Italia; Ricardo Guillermo Reyes, con destino en la jefatura de Inteligencia del Estado Mayor del Ejército, y Germán Emilio Riquelme, quien cumple funciones en el hospital militar central de Buenos Aires. También incluye a los oficiales retirados Jorge Larrateguy, Athos Gustavo Renes, Jorge Daniel Carnero Sabol, Norberto Tozzo, Luis Paletta, Ernesto Simoni y Aldo Martínez. Esos militares integraban el convoy que en la madrugada del 13 de diciembre de 1976 sacó a un grupo de presos de la prisión de Resistencia, a unos 1.000 kilómetros al norte de Buenos Aires, para trasladarlos en camiones unos 190 kilómetros hasta la cárcel de la ciudad de Formosa.