LD (Agencias) En particular el presidente palestino, bajo asedio en Ramala desde hace más de año y medio y aislado políticamente por EEUU e Israel, exigió el envío de observadores internacionales y que presione a Israel para que se comprometa a poner en práctica la "Hoja de Ruta". Arafat, condenó enérgicamente el atentado contra civiles en Jerusalén y el ataque israelí en el que Ejército israelí intentó matar al dirigente de Hamas, Abdel Asis Rantisi, y calificó a ambos de "terroristas".
Según Arafat, "la actual escalada de violencia amenaza con dinamitar la posibilidades de salvar el proceso de paz" tras las cumbres en Aqaba y Sharm el-Sheij la semana pasada y la puesta en marcha de la "Hoja de Ruta", que prevé el cese de los enfrentamientos entre palestinos e israelíes. Además, llamó al "fin inmediato de todos las operaciones (armadas)" y añadió que "el círculo del infierno de las operaciones terroristas tiene que terminar inmediatamente".
El líder palestino concluyó diciendo que "las facciones palestinas deben tomar conciencia de sus responsabilidades y no caer en la trampa de Israel que intenta acabar con las oportunidades de reanudar el proceso de paz".
Según Arafat, "la actual escalada de violencia amenaza con dinamitar la posibilidades de salvar el proceso de paz" tras las cumbres en Aqaba y Sharm el-Sheij la semana pasada y la puesta en marcha de la "Hoja de Ruta", que prevé el cese de los enfrentamientos entre palestinos e israelíes. Además, llamó al "fin inmediato de todos las operaciones (armadas)" y añadió que "el círculo del infierno de las operaciones terroristas tiene que terminar inmediatamente".
El líder palestino concluyó diciendo que "las facciones palestinas deben tomar conciencia de sus responsabilidades y no caer en la trampa de Israel que intenta acabar con las oportunidades de reanudar el proceso de paz".