LD (Agencias) En una conferencia de prensa celebrada en Bagdad, el primer ministro interino iraquí, Iyad Alaui, anunció seis medidas excepcionales para tratar de restablecer la seguridad en todo el país, y en especial en Faluya. Entre las nuevas directivas se incluye el cierre de la frontera con Siria y Jordania, y el establecimiento de un toque de queda en las poblaciones de Faluya y Ramadi.
Alaui subrayó que "he dado mi visto bueno a las fuerzas multinacionales y al Ejército iraquí para que limpien la localidad de terroristas". Además, adelantó que a partir de este lunes será detenida y encarcelada cualquier personas que en las dos citadas ciudades sean descubiertas portando armas.
En su intervención indicó que al menos 38 terroristas han muerto en el asalto nocturno al hospital general de Faluya, cuyo control han recuperado al amanecer las tropas de EEUU. Alaui detalló que "todavía no sabemos cuales son sus nacionalidades... se logró capturar a cuatro, dos de ellos procedentes de Marruecos". El mandatario recriminó a los terroristas haber convertido las mezquitas, los hospitales y otros lugares públicos en "depósitos de armas" y opinó que "ha llegado el tiempo de que Siria actúe. No permitiremos que ni asesinos llegados del exterior, ni los seguidores de Sadam, inflijan daño al pueblo iraquí".
En Faluya, soldados y fuerzas especiales de EEUU han tomado, sin combatir, el principal hospital de la ciudad donde, según los servicios secretos e informantes de Washington y Bagdad, se escondería el terrorista jordano Abu Musab al-Zarqaui, considerado el jefe de Al-Qaeda en Irak. Esa operación ha sido lanzada después de que los mandos militares estadounidenses confirmaran que sus fuerzas mantienen sellados todos los accesos a la ciudad de mayoría suní. Enseguida, aviones y la artillería pesada han bombardeado zonas del sur, centro y noreste de Faluya mientras que, según la cadena de televisión Al-Yazira, "un número enorme de tropas" ha penetrado por esas partes de la localidad y ocupado posiciones. Fuentes médicas han confirmado la muerte de trece personas y heridas en otras 16.
Según un comunicado leído en las mezquitas del oeste de Faluya, terroristas del autodenominado "Shura de Muyahidines" afirman que durante los combates sus miembros han logrado capturar a unos 35 soldados y a 103 miembros de la Guardia Nacional iraquí, además de destruir dos carros blindados, dos tanques y tres camiones de transporte de soldados. Esa información no ha sido confirmada por fuentes militares de Washington o Bagdad.
El Ejército de EEUU anunció la semana pasada que estaba ya dispuesto para iniciar el embate definitivo contra Faluya, mientras que el primer ministro interino iraquí, Iyad Alaui, subrayó que la resolución final estaba cerca. Tanto Washington como el Gobierno de transición creen que en Faluya se oculta el terrorista jordano Abu Musab al-Zarqaui, al que consideran la principal amenaza terrorista en Irak, y han exigido a los notables que controlan la ciudad que lo entreguen. El Consejo de jeques suníes que gobierna la ciudad ha negado que el supuesto socio de Osama ben Laden y sus seguidores esté en la ciudad.