L D (Agencias) "Fue un atentado llevado a cabo por un terrorista suicida", declaró Aftab Shaij, asesor del Ministerio del Interior paquistaní. Shaij, que visitó el lugar poco después de que se perpetrara la matanza, explicó que el terrorista "se colocó en medio de los fieles que rezaban e hizo explotar la bomba". Por su parte, el presidente del país, Pervez Musharraf, condenó el "malvado acto terrorista" y curso instrucciones para que se prestara toda la ayuda posible a las víctimas.
La mezquita afectada forma parte del prestigioso complejo escolar Sind Madrasa tul Islam, donde se imparten enseñanzas coránicas a jóvenes de entre 12 y 18 años. En el recinto hay también una mezquita suní, la corriente mayoritaria tanto en el mundo islámico como en Pakistán.
Numerosos jóvenes chiíes, a los que se unieron también algunos suníes, apedrearon a las fuerzas del orden que se desplazaron a la zona y provocaron daños en varios vehículos. Justificaron sus actos vandálicos acusando a las autoridades de no velar por la seguridad de la ciudad.
Karachi, capital económica y principal puerto de Pakistán, ha sido en los últimos años escenario de numerosos ataques terroristas, perpetrados por integristas islámicos. La mayor parte de ellos han afectado a los chiíes, que representan el 20 por ciento de la población del país.