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Abú Mazen pide que cesen los ataques contra Israel después del asesinato de seis israelíes

El presidente electo de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), Abú Mazen, pidió nuevamente a todos los grupos terroristas palestinos que cesen sus ataques contra Israel para poder negociar una tregua. Altos mandos del Ejército israelí han criticado esta estrategia del líder palestino porque consideran que ya ha llegado el momento de que la ANP intervenga con firmeza para cesar la anarquía en Gaza. Las reacciones se producen después de que seis israelíes murieran en un ataque de grupos terroristas palestinos contra un paso fronterizo.

L D (EFE)
Abú Mazen pidió encarecidamente este jueves a todos los grupos terroristas palestinos que cesen sus ataques contra Israel y negociar una tregua o "hudna", estrategia que altos mandos del Ejército israelí han criticado en la consideración de que ya ha llegado el momento de que la ANP intervenga con firmeza para acabar con la anarquía y el terrorismo en Gaza.

Un alto mando del Ejército israelí se lamentó y afirmó que "eso del diálogo no funciona. Las elecciones ya han pasado, el terrorismo continúa como siempre y la ANP no hace nada". Otras fuentes militares expresaron que este ataque sólo perjudica a los palestinos. El general de brigada Abir Kochavi, comandante del Ejército israelí en Gaza, dijo "no tener claro por qué los palestinos habrían de atacar un paso fronterizo por el que se abastecen de alimentos y medicamentos".

 
Esta ola de reacciones se produce después de que seis israelíes murieran en un ataque combinado de varios grupos terroristas palestinos contra un paso fronterizo en la franja de Gaza que también costó la vida a los tres atacantes, y cuyo objetivo, se puede entender, es ahuyentar a Israel por la fuerza de las armas.

El ataque comenzó poco antes de las 23.00 horas de este jueves con la detonación de una bomba de 120 kilos de explosivos que derrumbó el muro exterior de la terminal de Karni, el único paso comercial de la franja y por donde la población palestina se abastece de mercancías. La bomba abrió una brecha en el muro que separa la parte palestina de la israelí, por la que entraron los tres terroristas a lo que siguió un intenso tiroteo con granadas y armas automáticas.

Seis civiles israelíes murieron en el ataque, cinco de ellos eran funcionarios de la Autoridad de Puertos y Aduanas de Israel, y entre estos hay dos porteadores, un limpiador y un agente armado del departamento de seguridad aduanera. En el ataque resultaron también heridos otros cinco israelíes, dos de ellos en estado grave, y cuya evacuación se demoró largo tiempo porque desde el exterior otros terroristas bombardearon el recinto con proyectiles de mortero. El alto número de víctimas civiles se debe a que los tres terrorista detonaron el artefacto junto a una de las salas de transbordo de la terminal fronteriza.

El objetivo de los grupos terroristas palestinos es que parezca que la salida de Israel de la franja de Gaza no se debe a una retirada unilateral como pretende efectuar el primer ministro, Ariel Sharón, en la segunda mitad de 2005, dentro de su llamado "plan de desconexión". Un portavoz de los grupos terroristas que reconocieron la autoría del atentado reconoció que "el ataque es una continuación de la resistencia y una prueba más de que el enemigo abandonará Gaza bajo el fuego de los palestinos".

 
Poco después, el ministro israelí de Defensa de Israel, Shaul Mofaz, ordenó el cierre de forma inmediata de todos los pasos fronterizos con Gaza hasta revisar a fondo los mecanismos de seguridad y pedir explicaciones a la ANP sobre qué piensa hacer para evitar estos ataques. En represalia al ataque de anoche, helicópteros israelíes bombardearon de madrugada posiciones palestinas en la localidad de Deir el Balah, causando la muerte a un palestino y heridas a varias personas

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