Moratinos podría suceder a Kofi Annan como mediador en Siria

El exministro español de Asuntos Exteriores Miguel Ángel Moratinos figura en las quinielas como uno de los posibles sucesores de Kofi Annan como enviado de la ONU y la Liga Árabe para Siria, asegura hoy el diario libanés As Safir, que cita fuentes diplomáticas occidentales.

"Moratinos es el candidato más importante que se baraja para que prosiga la presencia de la ONU en Siria y herede el plan de Annan", subraya el periódico en su página web.

La publicación destaca, asimismo, que el diplomático español, de 61 años, posee experiencia en el conflicto árabe-israelí, con una extensa red de lazos creados entre 1996 y 2003, cuando fue el enviado espacial de la Unión Europea para el proceso de paz en Oriente Medio.

Las fuentes occidentales, cuya identidad el diario no revela, consideran que el ex jefe de la diplomacia española es uno de los que más posibilidades tiene de suceder a Annan por el apoyo que tiene en la UE y su conocimiento del régimen sirio.

Moratinos añade, además, a su experiencia en la región, su buena fama en el seno de la Liga Árabe y el respaldo de la familia Real de Catar, país que junto a Arabia Saudí lideran el frente árabe contra el presidente sirio, Bachar al-Asad.

En ese sentido, recuerda que el exministro español se reunió en múltiples ocasiones con el fallecido presidente sirio, Hafez al Asad, y su hijo y sucesor.

"La sucesión de una personalidad del peso de Annan requiere de un gran nombre", indica el rotativo, que se muestra, sin embargo, escéptico acerca de la misión al considerar que "no podrá cosechar más de lo que cosechó el anterior enviado".

En ese sentido, Ad Safir vaticina que pese a su credenciales, Moratinos no podrá avanzar debido a "las maniobras para ganar tiempo de Rusia y de los Amigos del Pueblo Sirio" (coalición internacional que reclaman la salida del presidente sirio).

Según el rotativo, junto a Moratinos se barajan también los nombres del expresidente finlandés y premio nobel de la paz Marti Ahtisaari, la ex fiscal jefe del Tribunal Penal Internacional para la antigua Yugoslavia (TPIY), Carla del Ponte, y el antiguo enviado de la ONU para Afganistán y el Líbano, Steffan de Mistura.