Las FARC siguen: secuestros y asesinatos

En los últimos tiempos, las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) han sufrido las bajas de sus principales líderes ante la ofensiva del Ejército colombiano en varios puntos del país. El pasado mes de febrero, un comunicado de los terroristas anunciaba la liberación de varios rehenes, agregando que no volverían a secuestrar.

Poco más de un mes después de este anuncio, los terroristas liberaron a los últimos uniformados secuestrados, algunos de los cuales estaban hasta seis años alejados de sus familias. Esto fue tomado por algún sector de la población como un gesto positivo hacia una paz definitiva. Sin embargo, el presidente Juan Manuel Santos, muy experimentado en los asuntos relacionados con las FARC por su trabajo como ministro del Defensa en el Gobierno de Álvaro Uribe, señaló entonces que ésta era la "última oportunidad" para la paz y subrayó que "las FARC han engañado al Gobierno en demasiadas ocasiones y el pueblo colombiano ha salido perjudicado por el afán de llegar a un acuerdo".

Las palabras no podían ser más acertadas ya que menos de un mes después de esta entrevista, el periodista francés Roméo Langlois fue secuestrado por los terroristas e incluso llegó a ser llamado como "prisionero de guerra", un nombre que fue rechazado de inmediato por las autoridades colombianas. El hecho ocurrió después de unos enfrentamientos entre el Ejército y las FARC en los que los terroristas volvieron a asesinar: esta vez un policía y tres soldados.

Ahora vuelven aún con más violencia con un atentado en el centro de Bogotá contra el exministro de Interior (2002-2004) Fernando Londoño, quien resultó herido. El saldo oficial revelado por las autoridades: dos muertos, el conductor del coche y un policía que formaba parte de su escolta. Por el momento, sólo la Policía de Bogotá, a través de su comandante, el general Luis Eduardo Martínez, ha atribuido a las FARC el atentado: "Puedo afirmar con mucha contundencia, con mucha vehemencia y mucho dolor de patria es que detrás de esto están los terroristas de las FARC, los dementes, los desquiciados de las FARC. (...) A nadie más se le puede atribuir y tenemos los elementos para poder decir lo que estamos diciendo".

Ante este terrible atentado, el presidente Santos se dirigió a los ciudadanos: "Tengan la seguridad de que todo el Estado luchará contra todas las modalidades de terrorismo" y agregó que ante los intentos de las FARC de desestabilizar, el Estado "está listo para afrontar ese reto y a no doblegarse". Además, dijo que "vamos a hacer todas las investigaciones que sean necesarias para dar con el paradero de los responsables de este atentado" y ofreció 500 millones de pesos (unos 220.000 euros) a quien pueda ofrecer información sobre los autores del atentado.

Según informa el diario El Tiempo, las autoridades tienen en su poder un vídeo donde aparece un hombre vestido con una bata blanca y una peluca que camina con una pequeña caja. Éste habría colocado este explosivo en el coche del exministro Londoño y tras hacerlo se había escapado hacia una zona donde lo esperaba otro hombre en moto. Algunas versiones apuntan a que el terrorista habría resultado herido en una mano.