El presidente francés, Nicolás Sarkozy, reconoció hoy su derrota en las elecciones presidenciales frente al socialista François Hollande, al que deseó "buena suerte
"Va a ser difícil, pero les deseo de todo corazón que Francia, nuestro país, nos ayude a superar nuestras tribulaciones", dijo Sarkozy. "Es nuestro país, nuestra patria, es Francia. Tenemos que pensar exclusivamente en la grandeza de Francia y en el bienestar de los franceses. Quiero darle las gracias a todos los franceses por el honor de verme elegido presidente de Francia durante cinco años. Nunca olvidaré este honor".
El aún presidente dijo que ha intentado hacerlo "lo mejor que he podido para proteger a los franceses de una crisis sin precedentes que ha aterrado al mundo entero". Y manifestó su "amor por Francia". "Salgo con la sensación de que los franceses pueden conseguirlo todo en las situaciones más difíciles", dijo, y dio las gracias a los millones de franceses que le han votado.
"He hecho todo lo posible para que nuestras ideas ganaran, me he comprometido totalmente, pero lo que no he conseguido ha sido convencer a la mayoría de los franceses", dijo. "Asumo toda la responsabilidad de este derrota. Yo era el jefe y cuando hay una derrota el jefe es el primero que tiene responsabilidad", afirmó.
Sarkozy dijo que en esta nueva época quiere "seguir siendo uno de vosotros" porque "comparto vuestras ideas y convicciones y podréis confiar en mí, pero mi lugar no podrá ser lo mismo. Mi compromiso con la vida del país será distinto. Quiero volver a ser un francés como los demás", concluyó.