Un coche-bomba ha explotado hoy en un populoso barrio de la ciudad siria de Alepo, la segunda del país y la mayor del norte de Siria, informó la televisión estatal y señalaron a EFE testigos presenciales.
La opositora Organización Siria de Derechos Humanos aseguró, en un breve comunicado, que hay "muertos y heridos" a consecuencia de la deflagración, que fue de "gran magnitud", según testigos. Las últimas cifras sitúan el balance en tres personas muertas y al menos 25 heridos. La explosión tuvo lugar en el barrio de mayoría cristiana de Al Suleimaniya, junto una sede de la Seguridad Política y una oficina postal, explicaron a EFE residentes en esa zona de Alepo.
La agencia oficial Sana confirmó que la acción "terrorista" se produjo cerca de una sede de Correos en Alepo, entre dos edificios residenciales, si bien no especificó si se han registrado víctimas mortales.
Este nuevo ataque tiene lugar solo un día después de que un doble atentado perpetrado en Damasco contra edificios de las fuerzas de seguridad sirias causase la muerte de al menos 27 personas y heridas a otras 140, según el Ministerio sirio de Interior.
Interior acusó a "grupos terroristas" del ataque, que se produjo "en el marco de la escalada de violencia de partes regionales e internacionales que instan públicamente a enviar armas a Siria", según un comunicado.
Por su lado, el dirigente del Consejo Nacional Sirio, principal órgano de la oposición en el exilio, Burhan Galion, responsabilizó al régimen de Bachar al Asad de "fabricar" los atentados con el fin de "justificar la presencia de grupos terroristas" y la represión.