Las Fuerzas de Seguridad noruegas desarticularon hace un año una célula islamista que quería cometer el primer atentado de Al Qaeda en Noruega, según informaciones del diario noruego VG.
Los agentes de la seguridad pública noruega (PST) habían colocado cámaras de vídeo en el apartamento en el que residía Mikael Davud, presentado por las autoridades como el jefe del grupo. Junto a él fueron detenidas otras tres personas cuya identidad no se hizo pública, y que según las informaciones del rotativo noruego estaban siendo espiados por los agentes desde hace más de un año.
En un primer momento, los agentes pensaron que la célula islamista estaba planeando cometer un atentado terrorista en un país vecino, aunque según fueron avanzando en la investigación descubrieron que el atentado iba a cometerse en suelo noruego, sin estar todavía definido. Además, descubrieron que escondían material suficiente material para la fabricación de un artefacto explosivo, o de varios pequeños artefactos.
El líder del grupo terrorista era un noruego de 39 años de origen uigur –etnia turcomana de religión musulmana, que procede del noroeste de China– llegado en 1999 a Noruega, donde obtuvo la nacionalidad en 2007. Los otros dos eran un kurdo iraquí, de 37 años, y un uzbeko de 31 años, ambos con residencia legal en Noruega.