Sin sobresalto alguno, tal y como estaba previsto, el Congreso de los Diputados autorizó este lunes la prórroga indefinida de la presencia española en la guerra de Libia, gracias al apoyo de todos los grupos políticos con representación en la Comisión de Defensa del Congreso (PP, PSOE, CiU y PNV), a excepción de UPyD –que se abstuvo– y de IU –que abandonó la sala en el momento de la votación por considerarla un fraude de ley–.
Esta decisión, según desgranó la ministra de Defensa, tendrá un coste de 14,4 millones de euros por cada mes a partir de ahora que dure la misión. Y a esa cantidad habrá que añadir los 43 millones de euros que ya ha habido que desembolsar desde que comenzase el conflicto bélico el pasado mes de marzo.
Durante su intervención, Carmen Chacón obvió la entrada española en la OTAN hace casi tres décadas para exigir a la Alianza Atlántica, como si nuestro país no fuera parte de la misma, que evite las víctimas civiles en los ataques a las tropas de Gadafi en Libia. "Volvemos a reclamar a la OTAN que evite a toda costa las posibles víctimas civiles. Cualquier víctima civil es excesiva. Es intolerable. Volvemos a reclamar que se extremen al cien por cien todas las precauciones", dijo.
La exigencia llegó después de que durante las últimas semanas los aliados españoles en la OTAN hubiesen solicitado en varias ocasiones que nuestro país se incorporase a los ataques selectivos contra objetivos estratégicos del Ejército de Gadafi, algo que han venido descartando tanto el presidente del Gobierno como la propia ministra de Defensa.
Chacón hizo un repaso de la participación española en la guerra de Libia, tanto en la misión de exclusión aérea como en la destinada al embargo marítimo al país norteafricano. Así, destacó que los cuatro cazas F18 españoles han realizado 184 salidas desde el inicio del conflicto bélico el pasado 19 de marzo, acumulando un total de 805 horas de patrullas aéreas de combate.
En lo que a los aviones cisterna se refiere, el Boeing 707, que lleva participando toda la campaña, ha realizado 68 misiones, acumulando 384 horas de vuelo y abasteciendo 1,5 millones de litros de combustible a los cazas de la Alianza. Por su parte, el TK10 Hércules, que se incorporó a la guerra el pasado 20 de abril, ha realizado 39 misiones, acumulando 200 horas de vuelo y alcanzando los 275.000 litros de combustible abastecidos.
Por último, cifró en 36 el número de misiones que lleva en avión de reconocimiento marítimo CN-235, en las que ha acumulado 236 horas de vuelo y ha identificado a 525 embarcaciones. La fragata F104 Méndez Núñez ha interrogado a 117 buques de interés, habiendo activado el zafarrancho de combate 19 veces para inspeccionar a otros tantos buques sospechosos. Por su parte, los dos submarinos que han participado en la misión -el S73 Mistral sustituyó en mayo al S74 Tramontana- han identificado a más de 800 embarcaciones.