Unos 500 vuelos han sido anulados este martes a causa de la nube de cenizas, según ha anunciado la Agencia Europea para la Seguridad en la Navegación Aérea (Eurocontrol) y recoge Efe.
A lo largo del día de este martes se registró una fuerte concentración de cenizas en el norte del Reino Unido y, como resultado, aproximadamente 500 vuelos fueron suspendidos de un total de 29.000 que hubieran sido gestionados de otra forma en toda Europa, indicó Eurocontrol en un comunicado.
Según el Centro Asesor sobre Ceniza Volcánica (VAAC), con sede en la Oficina Meteorológica británica, hay una "gran posibilidad" de que la nube de cenizas afecte mañana a algunas zonas de Dinamarca, el sur de Noruega y el suroeste de Suecia, recalcó la agencia europea.
Sin embargo, dados los nuevos procedimientos que se han puesto en marcha y en base a las previsiones sobre la dirección en la que se moverá la nube durante los próximos días, "se espera que el impacto real en los vuelos sea relativamente reducido", agregó Eurocontrol.
De la misma opinión es la Agencia Espacial Europea (ESA), que afirmó este martes que la erupción del volcán Grimsvoetn afectará menos al tráfico aéreo que la que el año pasado paralizó durante semanas los vuelos en el continente europeo.
La Unión Europea activó este lunes una célula de coordinación de crisis para responder con rapidez y de manera ordenada al posible impacto de la nube volcánica.
Eurocontrol resalta que en las zonas donde la concentración de ceniza es baja resulta seguro volar, mientras que donde hay altas concentraciones la mayoría de compañías deciden no volar o son los propios países los que establecen restricciones.
Las cancelaciones se producen justo un año después de la erupción del volcán islandés Eyjafjallajökull que provocó el cierre del espacio aéreo europeo durante una semana e interrupciones que se prolongaron durante un mes más, causando importantes agujeros de ingresos en las aerolíneas y el colapso del transporte aéreo.
Las aerolíneas calculan que se cancelaron unos 100.000 vuelos entre abril y mayo de 2010 por la llamada 'crisis de las cenizas'.