El ataque estadounidense del pasado jueves con un avión no tripulado contra elementos de Al Qaeda de la Península Arábiga (AQPA), filial de Al Qaeda en la región, tenía como objetivo al líder de la organización, Anuar al Awlaki, que salió ileso. En el ataque, que tuvo lugar en la remota región yemení de Shabwa, fallecieron dos terrorisas de nivel medio, los hermanos Musaid y Abdulá Mubarak.
En el primer bombardeo, Estados Unidos lanzó tres misiles contra un camión en el que viajaban Al Awlaki y un ciudadano de nacionalidad saudí, sin alcanzar su objetivo. Tras este primer intento, los hermanos Mubarak acudieron al lugar del incidente y cambiaron su vehículo con el camión, por lo que Al Awlaki no se encontraba en el camión durante el segundo ataque, que acabó con la vida de Musaid y Abdulá, según el diario The Wall Street Journal. "Deseábamos que fuera él", ha indicado una fuente estadounidense a CBS News.
"El Gobierno yemení proporcionó a las autoridades estadounidenses detalles de vital importancia sobre las actividades de Al Awlaki en Shabwa pocos días antes", ha señalado un oficial de seguridad del país asiático. Además, esta misma fuente ha agregado que las autoridades yemeníes tenían conocimiento del ataque antes de que éste se produjera.
Se estima que AQPA cuenta con unos 300 hombres en las remotas regiones montañosas del país, en las regiones de Shabwa, Abyan, Jouf y Marib. Asimismo, se cree que esta rama de Al Qaeda está detrás de múltiples ataques contra objetivos gubernamentales yemeníes.
Además se baraja la posibilidad de que AQPA haya servido de inspiración para ataques en territorio estadounidense -incluyendo el tiroteo en Fort Hood en el que un psiquiatra del Ejército estadounidense acabó con la vida de trece personas e hirió a otras 32- y la colocación de explosivos en un avión que cubría la ruta Amsterdam-Detroit el día de Navidad de 2009.
Washington considera que AQPA es la célula terrorista más activa del mundo. Tras la muerte del líder de Al Qaeda, Usama bin Laden, algunas fuentes gubernamentales estadounidenses consideran ahora al grupo liderado por Al Awlaki como el peligro más grave para Estados Unidos y otros países occidentales.