L D (Agencias) Cuba advirtió este viernes de que las sanciones que estudia imponer el Gobierno de EEUU, como prohibir vuelos y envíos de remesas a la isla, estimularán la emigración ilegal. "Las presuntas medidas que se anuncian de prohibir vuelos y remesas estimularían igualmente la emigración ilegal, de la que en nada se podría culpar a Cuba, que cumple estrictamente las obligaciones que le corresponden en los acuerdos migratorios, sin una sola excepción", según una nota oficial publicada hoy en la prensa cubana. Cuba respondió así a una información aparecida el jueves en "The NewYork Times" en la que se apuntaba que el Gobierno de Estados Unidos estudia imponer nuevas sanciones a Cuba por la reciente persecución y juicios sumarios a disidentes en ese país.
"The New York Times", que citaba fuentes oficiales, indicaba que entre las sanciones más drásticas que podría decidir Washington está impedir a los cubanos residentes en EEUU el envío de remesas de dinero a sus familiares en Cuba o suspender los vuelos directos al país caribeño. "La economía cubana y sus servicios sociales pueden resistir la suspensión de los supuestamente grandiosos beneficios de tales remesas, o de los vuelos charter o cualquier otra medida, incluida la suspensión de las ventas de alimentos", agrega la nota. "Sin recibir el más mínimo crédito bancario hemos adquirido alimentos que se elevan ya a más de 300 millones de dólares, sin dejar de pagar hasta el último centavo y sin un segundo de atraso", dice. "Tal medida sólo serviría para demostrar que Estados Unidos, por causas estrictamente políticas, no es un abastecedor seguro y confiable de alimentos", precisa el comunicado.
El régimen del dictador sostiene que "las dificultades de prohibir las remesas y los viajes a Cuba, afectando a un incalculable número de personas tanto en Cuba como en Estados Unidos, serán para el gobierno de ese país". "Los afectados harán por sus familiares lo que esté a su alcance, a fin de impedir que sus más elementales vínculos y relaciones sean tan injusta y arbitrariamente sacrificados", apunta. Además, sigue el comunicado, las advertencias de EEUU de que no tolerarán éxodos de balseros "se contradicen totalmente con el estímulo colosal que las autoridades de ese país han ofrecido a secuestradores de naves aéreas y marítimas cubanas". "Más del 90 por ciento de los emigrantes ilegales llegan a través de lanchas rápidas de traficantes de migrantes residentes en territorio norteamericano", afirma.
Esto, unido "a la absurda y criminal Ley de Ajuste Cubano, y la ambición de los traficantes que cargan dos o tres veces más personas de lo que permite la capacidad de las embarcaciones, ha provocado la muerte de gran número de personas", añade. "Es evidente que los premios y privilegios que concede el gobierno de Estados Unidos a delincuentes que con métodos terroristas secuestran aviones y barcos, en nada contribuyen a la emigración legal y ordenada con la que Estados Unidos se comprometió", asegura el comunicado. "Tampoco contribuyen las infames calumnias contra Cuba por las medidas enérgicas que de forma absolutamente legal Cuba se vio obligada a tomar para evitar una ola de secuestros de aviones y embarcaciones de pasajeros", señala el comunicado en referencia a la reciente ejecución de tres secuestradores de una lancha.
"The New York Times", que citaba fuentes oficiales, indicaba que entre las sanciones más drásticas que podría decidir Washington está impedir a los cubanos residentes en EEUU el envío de remesas de dinero a sus familiares en Cuba o suspender los vuelos directos al país caribeño. "La economía cubana y sus servicios sociales pueden resistir la suspensión de los supuestamente grandiosos beneficios de tales remesas, o de los vuelos charter o cualquier otra medida, incluida la suspensión de las ventas de alimentos", agrega la nota. "Sin recibir el más mínimo crédito bancario hemos adquirido alimentos que se elevan ya a más de 300 millones de dólares, sin dejar de pagar hasta el último centavo y sin un segundo de atraso", dice. "Tal medida sólo serviría para demostrar que Estados Unidos, por causas estrictamente políticas, no es un abastecedor seguro y confiable de alimentos", precisa el comunicado.
El régimen del dictador sostiene que "las dificultades de prohibir las remesas y los viajes a Cuba, afectando a un incalculable número de personas tanto en Cuba como en Estados Unidos, serán para el gobierno de ese país". "Los afectados harán por sus familiares lo que esté a su alcance, a fin de impedir que sus más elementales vínculos y relaciones sean tan injusta y arbitrariamente sacrificados", apunta. Además, sigue el comunicado, las advertencias de EEUU de que no tolerarán éxodos de balseros "se contradicen totalmente con el estímulo colosal que las autoridades de ese país han ofrecido a secuestradores de naves aéreas y marítimas cubanas". "Más del 90 por ciento de los emigrantes ilegales llegan a través de lanchas rápidas de traficantes de migrantes residentes en territorio norteamericano", afirma.
Esto, unido "a la absurda y criminal Ley de Ajuste Cubano, y la ambición de los traficantes que cargan dos o tres veces más personas de lo que permite la capacidad de las embarcaciones, ha provocado la muerte de gran número de personas", añade. "Es evidente que los premios y privilegios que concede el gobierno de Estados Unidos a delincuentes que con métodos terroristas secuestran aviones y barcos, en nada contribuyen a la emigración legal y ordenada con la que Estados Unidos se comprometió", asegura el comunicado. "Tampoco contribuyen las infames calumnias contra Cuba por las medidas enérgicas que de forma absolutamente legal Cuba se vio obligada a tomar para evitar una ola de secuestros de aviones y embarcaciones de pasajeros", señala el comunicado en referencia a la reciente ejecución de tres secuestradores de una lancha.