L D (Agencias) Solbes compareció ante la Comisión de Control Presupuestario del Parlamento Europeo en una sesión dedicada al asunto de Eurostat. Durante el debate, algunos eurodiputados preguntaron al comisario, que es responsable de dicha oficina, si no pensaba "asumir responsabilidades y dimitir". Solbes respondió que aceptaba responsabilidades "por todo lo que he hecho, por lo que no he hecho teniendo que haberlo hecho, pero no por lo que no sabía".
El comisario expresó su "compromiso personal y total dedicación" para que su sucesor, cuando acabe su mandato, encuentre Eurostat "en perfectas condiciones". El vicepresidente de la Comisión Europea encargado de Reforma Administrativa, Neil Kinnock, presente en la comparecencia, fue preguntado por los diputados sobre si el Ejecutivo comunitario se había planteado pedir la dimisión de Solbes. Kinnock respondió de forma rotunda con un "no, y si quiere una respuesta ampliada, absolutamente no".
La Comisión Europea abrió procedimiento disciplinario a tres responsables de Eurostat tras un informe de la Dirección General de Presupuesto que contenía indicios claros de prácticas irregulares. El escándalo salió a la luz cuando la prensa informó el pasado mayo de la existencia de una presunta "caja negra" en el servicio externo de venta de datos de Eurostat y la posible implicación de su director general, Yves Franchet, y del director de unos de los seis departamentos del organismo, Daniel Byk.
El comisario expresó su "compromiso personal y total dedicación" para que su sucesor, cuando acabe su mandato, encuentre Eurostat "en perfectas condiciones". El vicepresidente de la Comisión Europea encargado de Reforma Administrativa, Neil Kinnock, presente en la comparecencia, fue preguntado por los diputados sobre si el Ejecutivo comunitario se había planteado pedir la dimisión de Solbes. Kinnock respondió de forma rotunda con un "no, y si quiere una respuesta ampliada, absolutamente no".
La Comisión Europea abrió procedimiento disciplinario a tres responsables de Eurostat tras un informe de la Dirección General de Presupuesto que contenía indicios claros de prácticas irregulares. El escándalo salió a la luz cuando la prensa informó el pasado mayo de la existencia de una presunta "caja negra" en el servicio externo de venta de datos de Eurostat y la posible implicación de su director general, Yves Franchet, y del director de unos de los seis departamentos del organismo, Daniel Byk.