La empresa Divorce Hotel permite en una escapada de fin de semana consumar un proceso de divorcio por una tarifa que va desde los 2.500 euros gracias a la cual un matrimonio se registra en el hotel el viernes, y el domingo, cuando se van, su matrimonio ha finalizado.
El Divorce Hotel, creación del empresario holandés Jim Halfens, es el primer alojamiento del mundo en ofrecer una ruptura exprés para aquellas parejas que quieran terminar su relación de una forma amistosa.
Los matrimonios que deseen divorciarse deberán realizar una solicitud y tras la aprobación se alojarán en uno de los varios hoteles-boutique de cinco estrellas con los que colabora el Divorce Hotel. Las parejas hacen la reserva de forma conjunta, duermen en habitaciones separadas y los desayunos y las comidas las hacen juntos si lo desean.
A lo largo del fin de semana un equipo de profesionales -abogados, psicólogos, notarios, agentes inmobiliarios- ayudará a la pareja a poner fin a su matrimonio. En algunos casos, los huéspedes incluso aprovechan el tiempo libre para hacer alguna visita turística por los alrededores.
Las tarifas parten de los 2.499 euros e incluyen las dos noches de hotel en un alojamiento cinco estrellas con diversos servicios para aliviar tensiones de estos momentos: sauna, jacuzzi, carta de masajes, así como el asesoramiento y todos los trámites legales.
Por el momento, el Divorce Hotel se ha puesto en marcha en Países Bajos para ciudadanos neerlandeses, aunque su promotor no descarta ampliarse a otros países a corto plazo.