Los vigilantes de seguridad privada del Metro de Madrid han recibido la orden directa de que "no se haga referencia a las etnias de los implicados" durante el operativo de vigilancia especial con motivo de las agresiones con arma blanca entre bandas latinas. Según esta misma orden directa, los trabajadores deben limitarse a reflejar en los informes que se trata de una "banda de jóvenes conflictivos".
Este pasado fin de semana se activó la "Operación Alto Impacto" con motivo del aumento de la violencia por parte de las bandas latinas en diferentes puntos de Madrid, con la muerte de dos de sus miembros en tan solo un fin de semana.
La operación incluye el despliegue de un total de 834 efectivos de la Guardia Civil en nueve municipios y 514 agentes de la Policía Nacional.
La empresa de seguridad privada que se encarga de la vigilancia del Metro de Madrid envió un comunicado interno a sus trabajadores el pasado miércoles, 9 de febrero. En ese comunicado al que ha tenido acceso Libertad Digital, Trablisa explica que durante los próximos días "la brigada móvil va a realizar una operativa especial con motivo de las agresiones con arma blanca entre bandas".
También ordena a los vigilantes que "a la hora de elaborar los informes no se haga referencia a las etnias de los implicados". En este caso se opta por eliminar el concepto de banda latina para sustituirlo por un eufemismo: "Banda de jóvenes conflictivos".
Además del blanqueamiento de los incidentes con bandas latinas violentas, los vigilantes de seguridad del Metro de Madrid han denunciado que se les obliga a acudir a este tipo de intervenciones sin la protección adecuada: "Vamos a pecho descubierto. Sólo llevamos la indumentaria de protección básica. Con estos medios ¿cómo vas a intervenir en un caso de altercado con arma blanca?", cuestiona uno de los trabajadores.