El margen es estrecho y las opciones limitadas. Cataluña entra de nuevo en una semana decisiva para desbloquear la investidura y a quince días de que expire el plazo legal del 26 de mayo para que el candidato de ERC, Pere Aragonès, logre los apoyos suficientes, el separatista solo tiene garantizados 9 votos —los de la CUP— de los 54 que necesitaría para ser investido en segunda vuelta. Aún así, el dirigente de ERC espera sumar en las próximas horas los 8 apoyos de los comunes y solo le harían falta 4 más del grupo del fugado Puigdemont.
Por si esto no es posible, tal y como auguran la gran mayoría de los grupos en Cataluña, la Junta de Portavoces de la cámara ha dado luz verde a acelerar la constitución de la Diputación Permanente que es el órgano encargado de cumplir con las funciones de la cámara cuando se encuentra cerrado el periodo de sesiones o bien cuando se disuelve el Parlamento para una nueva la convocatoria electoral. La Diputación Permanente se pondrá en marcha este jueves "por lo que pueda pasar", han apuntado fuentes parlamentarias, para estar preparados ante un nuevo ruido de urnas en Cataluña.
Ese mismo jueves, comparecerá en calidad de vicepresidente en funciones Pere Aragonès, para informar sobre la situación sanitaria, económica y social en Cataluña y responder a las preguntas formuladas a este respecto por el PSC, Cs y el PPC. A primera hora, el pleno de la cámara también elegirá la designación de los ocho senadores de ERC, PSC y Junts, después de vetar a Vox la posibilidad de proponer a un candidato tal y como le corresponde en base a los resultados obtenidos de las elecciones del 14 de febrero.
Elecciones en julio
En paralelo a las conversaciones que el candidato de ERC mantiene con los de Puigdemont y los comunes en busca de los votos que necesita para ser investido, es a Laura Borràs, como presidenta del Parlamento catalán, a quien corresponde la convocatoria del pleno de investidura. Una convocatoria que ya ha advertido la separatista que no activará hasta que Aragonès no tenga garantizados los apoyos suficientes. Este lunes, el portavoz de ERC en el Congreso, Gabriel Rufián, le apremiaba a "cumplir" con el reglamento de la cámara que preside y convocar ese pleno cuanto antes.
De acceder Borràs a fijar una fecha para ese pleno y en el caso de que Aragonès no consiguiese ser investido, el Parlamento quedaría automáticamente disuelto y se convocarían nuevas elecciones a celebrar al cabo de 54 días, eso es, a mediados del mes de julio. Una situación que nos traslada a septiembre de 2015 cuando los 4 diputados de la CUP se negaron a investir a Artur Mas. Fue el famoso "pas al costat" que acabó con la designación in extremis de Carles Puigdemont. 6 años después, también son 4 diputados, en este caso del partido del propio fugado, los que tienen en su mano el poder de enviar a Cataluña a unas nuevas elecciones.
Rufián: "ERC no es la criada de nadie"
La ruptura de los socios separatistas se ha trasladado este martes al Congreso, lugar que los portavoces de ERC y Junts han convertido en su propio escenario bélico. La portavoz del partido de Puigdemont, Miriam Nogueras, ha insistido en que no son ellos quienes se levantan de la mesa y que le corresponde a ERC explicar y "ser sinceros" respecto a sus intenciones. Nogueras ha devuelto a los de Junqueras la acusación vertida este lunes por Marta Vilalta de haberse sentido estafados: "Si no nos entendemos, eso sí sería una estafa histórica a los votantes y a los ciudadanos".
Afirmación que minutos después recibía respuesta por parte del portavoz de ERC, Gabriel Rufián en el Congreso: "De Convergencia, de divergencia o de Junts per Cataluña, yo ya no sé. ERC no es la criada de nadie. A ERC ni se le domestica, ni se el tutela. Los resultados son los que son. Llevamos 225 días con un gobierno en funciones, ya basta", ha dicho el separatista en su habitual tono de reproche hacia los del fugado.