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YouTube y Ning no quieren sexo en sus servidores

Violencia y sexo son los contenidos que más problemas suelen causar en forma de protestas y retiradas de publicidad a las web 2.0 que se alimentan de las creaciones de sus usuarios. De ahí que no sorprendan los anuncios de YouTube y Ning de endurecer sus políticas contra los contenidos sexuales.

LD (Otr/press) El 35% de las páginas web existentes son de contenidos pornográficos, según un reciente estudio sobre la materia elaborado por Optenet. Está claro que es un tema que vende bien en la red y por eso muchos portales optan, sin entrar en la pornografía, por coquetear con los contenidos subidos de tono. No es el caso de muchas de las webs 2.0 en las que los contenidos creados por los usuarios acaparan todo el protagonismo y por eso YouTube, habitualmente poco concesiva con el tema, va a endurecer su "censura".

En YouTube actualmente no es posible subir contenidos sexualmente explícitos. Si un usuario lo hace, poco tarda el portal en eliminarlo de forma fulminante. Sí existen aún contenidos de naturaleza erótica sólo para mayores de 18 años. Pero a partir de ahora el portal propiedad de Google restringirá los videos que también contengan "material que sugiera sexo" a usuarios que tengan 18 años o más, según recogió Otr/press en el blog de YouTube.

Se trata de una serie de medidas que se empezarán a tomar de forma inmediata y que también afectarán a otros aspectos del popular portal de intercambio de vídeos. YouTube además alterará su algoritmo de búsqueda para que no aparezcan en las listas de los vídeos favoritos los que contengan "vídeos explícitos" y disuadirá a los usuarios de que empleen imágenes o palabras "sensuales" para promocionar sus vídeos.

El anuncio de YouTube en su blog, publicado esta semana, ha levantado una polvareda entre los usuarios en forma de respuestas a la anotación del blog. Nada menos que más de 1.300 usuarios escribieron indignados, la mayoría en contra de esta política puritana.

Un portavoz de YouTube, Scott Rubin, aseguró que el cambio en la política no se debe a ningún incidente específico ni a una demanda de algún usuario del portal ni tampoco a los esfuerzos de Google por rentabilizar el portal de vídeos mediante anuncios publicitarios. "No hay ninguna pistola humeante por ningún lado", aseguró Rubin a The New York Times. "Lo que ocurre es que siempre estamos buscando maneras de mejorar la experiencia de YouTube".

Otro ejemplo de web que se llena de contenidos creados por usuarios y que va a ser mucho más restrictiva con los contenidos de naturaleza sexual es Ning, una plataforma pensada para que los internautas creen sus propias redes sociales . Ning también anunció esta semana que en breve dejará de permitir las redes dedicadas a contenidos sexuales
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