Según el comunicado, la compañía de Bill Gates ha aceptado que sus rivales puedan emplear esta información para desarrollar y vender productos a escala global. También se ha avenido a dividir en paquetes la información ofertada, de forma que cada operador pueda obtener los datos específicos que requiera y no esté obligado a abonar los derechos de copia de toda la información en su conjunto.
Microsoft ofrecerá además "cierta categoría" de datos libre del pago de derechos de copia. Sin embargo, se ha negado a compartir la información con los fabricantes del llamado software libre, aquel cuyo uso no requiere del pago de licencias y permite al usuario conocer y alterar los códigos-fuente del programa, como es el caso de Linux, el sistema operativo rival de Windows.
La CE ha valorado positivamente los compromisos de Microsoft, que someterá en las próximas semanas al examen de otros operadores del mercado para evaluar entre otras cosas si el coste de las licencias para acceder a los datos de Windows es razonable. Si el examen es positivo, Bruselas podría aceptar tales compromisos de forma provisional. No obstante, se ha comprometido a seguir defendiendo, en el proceso que desarrolla el Tribunal de Primera Instancia de la UE, los derechos del sector del software libre a los datos que garanticen la compatibilidad de sus programas con el casi universal sistema operativo.
Si el Tribunal de Primera Instancia, que juzga el recurso de Microsoft contra el conjunto de la decisión de la CE, acaba fallando en favor del Ejecutivo comunitario, éste exigirá a la empresa de Bill Gates que permita el acceso de los fabricantes de software libre al menos a los datos de Windows que no impliquen innovaciones técnicas, según el comunicado.