LD (EFE) Los correos electrónicos no deseados, conocidos popularmente como "spam", producen una cantidad de emisiones de efecto invernadero equivalente a la originada por 3,1 millones de vehículos, según un estudio publicado hoy por la compañía de seguridad informática McAfee.
El estudio, titulado La huella de carbono del spam, afirma que el envío de correos no deseados a los ordenadores de todo el mundo supone un gasto energético de 33.000 millones de kilovatios por hora (KWh) a lo largo de todo un año, una cantidad de electricidad que podría abastecer a 2,4 millones de hogares.
El informe destaca que se trata de una energía desaprovechada, ya que el 80 por ciento del spam termina siendo ignorado y borrado por los internautas.
El vicepresidente de desarrollo de producto de McAfee, Jeff Green, destacó la necesidad de parar el spam "desde sus propios orígenes" y a través del desarrollo de mejores sistemas de defensa. "Estas medidas -consideró Green- permitirían ahorrar tiempo y dinero, y pagarían un gran dividendo al planeta mediante la reducción de las emisiones de carbono".