LD (Europa Press) La sociedad gestora de derechos de autor británica PRS reclamaba a Google una cantidad mayor por la emisión a través de su portal de videoclips musicales de la que paga actualmente Google. Sin embargo, en YouTube consideran que la PRS pide demasiado y por eso han tomado una decisión salomónica: los británicos pueden acceder al portal pero no a los videos musicales.
La medida que ha tomado YouTube parece que no ha gustado en ninguna de las dos partes pero ha sido la PRS la que se lo ha tomado peor. El responsable de alianzas de vídeo en YouTube, Patrick Walker, aseguró que la situación es "lamentable", en declaraciones a la BBC, frente a la consideración de la sociedad de derechos: un "escándalo".
Desde la PRS consideran que YouTube está "castigando" a los consumidores británicos y a los letristas cuyos intereses representan, según ha dicho su director Steve Porter. "Google nos ha dicho que han tomado esta decisión porque desean pagar significativamente menos de lo que pagan ahora a los escritores (...), a pesar del incremento masivo del visionado de YouTube".
YouTube paga por el uso de los vídeos a tres de las cuatro principales firmas discográficas con presencia en Reino Unido y ha tomado esta decisión como protesta a las pretensiones de la PRS. "Sentimos que estamos en puntos tan distintos que tenemos que retirar el contenido mientras duran las negociaciones con la PRS", ha asegurado Walker.
El portal de vídeo considera que las demandas de la PRS supondrían "perder dinero con cada emisión de un vídeo de música".