En su mensaje, agradecen el "apoyo de miles de personas de todas las religiones" y confían en que la situación creada tras el estreno de la película "cree un debate que beneficie y que eduque a todos sobre como se pueden aceptar las culturas de los demás".
La polémica producción de Wilders desató el viernes las condenas de la comunidad internacional, tanto de países islámicos como Indonesia, Pakistán e Irán como de las instituciones europeas y de las Naciones Unidas, que consideran que el film incita al odio y la violencia.
La película es una composición de imágenes ya conocidas, entre las que figuran algunas de los atentados islamistas del 11 de septiembre de 2001 en Nueva York, del 11 de marzo de 2004 en Madrid y del 7 de julio de 2005 en Londres, que se intercalan con fragmentos del Corán que incitan a la lucha contra los no creyentes.
Pese a su retirada de www.liveleak.com el cortometraje puede verse en numerosas páginas de internet.