La jugada podría también suponer otro revés para la compañía surcoreana, que trata de reforzar su deficitaria división de móviles con nuevos dispositivos, ya que su tableta podría salir demasiado tarde para un mercado congestionado y liderado por el exitoso iPad de Apple.
"Tenemos previsto introducir una tableta que funcione con la versión más fiable de Android (...) Estamos hablando con Google para decidir la versión más adecuada para nuestra Tablet", dijo un responsable de LG.