Los resultados anunciados el jueves muestran que la centenaria empresa de Kioto mantiene, gracias a la Wii, su liderazgo en la batalla por la última generación de consolas, por delante Sony con su PlayStation, en gran parte debido a su menor precio.
En el último ejercicio fiscal, Nintendo vendió 18,61 millones de unidades de su consola interactiva Wii en todo el mundo y espera colocar este año 25 millones más en el mercado global.
Aunque en el año fiscal 2007 las ventas de su consola portátil Nintendo DS fueron elevadas, ahora espera que en el ejercicio 2008 caigan las ventas un 7,6 por ciento, si bien supondrían 28 millones de unidades, al tiempo que prevé que las del software para la DS crezcan un 0,7 por ciento, hasta los 187 millones.
Para el año fiscal 2008, que concluye en marzo de 2009, la empresa de entretenimiento nipona espera un beneficio neto de 325.000 millones de yenes (3.135 millones de dólares) y que sus ventas se incrementen un 7,6 por ciento, hasta los 1,8 billones de yenes (17.357 millones de dólares).
En cuanto al beneficio por operaciones, confía en que durante el año fiscal 2008 sea de 530.000 millones de yenes (5.110 millones de dólares), un 8,8 por ciento más que en el anterior ejercicio.