(Libertad Digital) Estas subastas, que ya se realizan con bienes inmuebles embargados por la Agencia Tributaria, se celebrarán al unísono en la correspondiente sede de la Agencia convocante y a través del site de este organismo, en el que están disponibles además las fotografías de los bienes por los que se puede pujar. La primera de estas pujas tendrá lugar en Murcia el próximo jueves y en ella se ofertarán quince automóviles, con unos precios de salida que van desde casi 4.000 euros hasta cerca de 56.500. En ella, se sacarán al mercado ocho BMW, un Mercedes, un Volkswagen, un Cadillac, un Jaguar, un Peugeot, y un Renault, además de un camión isotermo de la marca Mercedes.
En la segunda de estas subastas, que se celebrará en Alicante el 9 de julio, se ofertarán cuatro óleos de pintores anónimos, de los que tres son atribuidos a la escuela española del siglo XVII, y otro data de finales del siglo XIX. Sus precios de salida van desde los mil a los 1.800 euros. Una tercera subasta con estas características tendrá lugar en Valladolid, el 10 de julio, en donde se ofertarán varios muebles, antigüedades y piezas de joyería, entre los que destaca un aparador estilo Imperio francés con un valor de tasación de 21.000 euros. En dicha subasta saldrán al mercado además un lote de dos bandejas ovaladas de plata con un precio de salida de 2.057 euros y otro con tres bandejas de igual material, por 1.869 euros.
En la delegación de la Agencia Tributaria de Jerez de la Frontera (Cádiz) se subastarán equinos el 17 de julio, cinco potros (de ellos tres hembras) pura raza española, nacidos entre 1998 y el 2001, con unos precios de salida que van desde los 550 euros hasta los 2.100 euros. Otra subasta con estas características tendrá lugar el 30 de julio en Málaga, donde se ofertarán bienes muebles entre los que se incluyen joyas, con un valor de tasación de hasta 900 euros.
Los interesados en participar en estas subastas requieren de un certificado de usuario y habrán de constituir un depósito del veinte por ciento del valor de licitación del bien por el que quieren pujar. También se pueden programar las pujas por ordenador con antelación, fijando un precio máximo por el interesado de modo que no esté obligado a permanecer ante la pantalla del ordenador en el momento de la subasta. Concluida la subasta, los depósitos efectuados serán devueltos a los internautas que no resulten adjudicatarios de ningún bien.