(Libertad Digital) Google, que acaba de cumplir un año de cotización en el Nasdaq, lleva bastante tiempo adquiriendo infraestructuras de cable en los Estados Unidos, sin hacer mucha publicidad de ello. Un artículo de Business 2.0 relata cómo la sociedad se ha aprovechado de la quiebra de numerosas empresas del sector de las telecomunicaciones para adquirir sus infraestructuras, y crear así una red de banda ancha.
El uso que podría darle a su propia red es muy variado. El autor del artículo, Om Malik, apunta a que una de las principales razones que podrían estar detrás de estos movimientos de la compañía sería el ahorro de costes. En la actualidad, cada vez que un usuario hace una búsqueda por Google, los datos se transmiten a una red de un servidor, que contacta a su vez con los servidores de Google a través de un mayorista. Esta operación le cuesta a Google hasta 60 dólares por megabit por segundo, cada mes, un coste que, apunta Om Malik, se incrementaría a medida que crecen los servicios de banda ancha. Con la creación de su propia red, Google evitaría tener que acudir a intermediarios.
De este modo, estaría internalizando parte de los servicios que ahora contrata fuera, para ahorrar costes. No obstante, para que un movimiento como este resulte rentable, la empresa ha de tener planes específicos para su red de cable. Una de las opciones sería que la compañía de Larry Page y Sergey Brin, es la de ofrecer conexión a internet gratis por medio de la tecnología WiFi.